Una relación de confianza entre dos amigos, que se rompió de la manera menos esperada: un ataque sexual a la hija del hombre que le permitía al otro quedarse en su casa. Para el fiscal, Roberto Mallea, y sus colaboradores, Benjamín Spatzer y Analía Di Lernia (UFI ANIVI) esa relación de circunstancias con el violento desenlace están acreditadas. Y por eso buscan que, al cabo del juicio, el juez, Gerardo Fernández Caussi, le imponga al sospechoso una pena de 10 años de cárcel.

El sospechoso en cuestión es el changarín, Miguel Angel Nazara. Y llegó en libertad al proceso, que se inició con una denuncia el 27 de agosto del año pasado. En ese reclamo de Justicia, se detalló que Nazara se quedaba en la casa de la víctima porque era amigo de su padre, pero en un momento se sobrepasó y violó a su hija, por entonces de 15 años.

Según Fiscalía, el relato de la menor, el informe y las pericias psicológicas que le practicaron, respaldan la teoría de que fue víctima de un ataque sexual.

Nazara es representado en el juicio por el defensor oficial, Hugo Trigo, y su ayudante, Andrea Heras. Ambos buscarán que sea desligado de la maniobra que le atribuyen o al menos que los cargos en su contra se atenúen.