Néstor Matías Olmedo (23) habló hoy por primera vez en la causa que lo tiene como único sospechoso de haber intentado matar a golpes y puntazos con un trozo de vidrio, a una joven de 19 años con la que llevaba un año de relación y un poco más de dos de convivencia, en Chimbas. Ante el juez, Gerardo Fernández Caussi, el fiscal Atilio Yanardi (UFI CAVIG) y los representantes de la Defensa Oficial que lo asisten, Lucas Quiroga y Ana Herrero, insistió en su intento por desligarse y cargar culpas sobre su ahora expareja.

Dijo que la madrugada de aquel día discutieron porque ella se oponía a que saliera y que incluso él debió arrojar la droga que pensaba consumir por la ventana, para que ella no se la destruyera. Que en un momento la joven empezó a autoagredirse con un cuchillo (situación que era una constante en ella, explicó) a golpearse la cabeza contra el piso y a intentar acuchillarlo a él. Que en esa confusión, también se encerró en el baño, él derribó la puerta y la tumbó, desmayándola. Y que salió herido en un dedo por intentar quitarle el cuchillo.

También habló de una situación a que todos los presentes en la audiencia les resultó algo insólita: dijo que el médico que llegó al lugar para auxiliar a la joven, lo tomó a él de un dedo y se lo quebró. Esa madrugada, los vecinos ya lo habían escuchado decir que ella se autoagredió y quiso matarlo.

Para Fiscalía, sin embargo, el relato de la joven y otras evidencias, complican a Olmedo como autor de la agresión con un trozo de vidrio de un espejo. Esa madrugada, la joven fue encontrada inconsciente y toda ensangrentada.

La audiencia de hoy había sido solicitada también por la abogada de la denunciante, Ana Valentina Sánchez Salmuni, para intentar que a Olmedo le sumen dos agravantes: el ensañamiento (hacer sufrir a la víctima) y la alevosía (atacarla a traición). Sin embargo el juez rechazó su pedido, con el argumento de que los hechos no habían variado y no era el momento procesal oportuno, pues su planteo puede efectuarlo cuando se cierre la investigación para pasar el caso a juicio.

El fiscal también pidió la prórroga de 3 meses en el encierro preventivo hasta concluir con la investigación. El juez consideró que el imputado podría fugarse u obstaculizar el trámite de la causa y lo mandó al Penal de Chimbas por otros tres meses.