El ENI N° 27 “Julio Cortázar”, ubicado en calle Maurín y Storni, Villa Aberastain, Pocito, atraviesa una preocupante situación de inseguridad que ha comprometido su funcionamiento. En los últimos meses, la institución ha sido blanco de reiterados robos que dañaron su infraestructura y afectaron el bienestar de los 400 niños que asisten diariamente.
El último incidente ocurrió en la madrugada de este martes, cuando fueron robados dos ventiladores y habían desinstalado otro pero no alcanzaron a llevarlo. Los delincuentes rompieron una alambrado perimetral, lindante al predio de INTA.
Judith Ridao, directora del establecimiento, detalla que los episodios comenzaron en diciembre del año pasado con el robo de caños de los aires acondicionados. Este hecho no solo dejó a la escuela sin este sistema de refrigeración, sino que también generó daños en la instalación eléctrica. Con la reciente sustracción de los ventiladores -recién reparados- y materiales de trabajo, se incrementaron las dificultades en una escuela que depende completamente de la electricidad para climatizar sus aulas.
“Hemos agotado todas las gestiones posibles. La supervisora, las autoridades del Ministerio de Educación y el municipio están al tanto. Se nos sugirió contratar vigilancia privada, pero es una alternativa imposible de costear”, afirmó Ridao, quien también expresó su preocupación por la falta de personal policial asignado a la zona.
El ENI N° 27 se encuentra a escasos metros de la plaza cabecera de Villa Aberastain, pero esta cercanía no ha disuadido a los delincuentes, que han ingresado por diversos puntos del predio. La institución, que funciona en turnos mañana y tarde, sigue siendo vulnerable.
“Es una institución nueva, pero los daños acumulados son difíciles de reparar. Pedimos colaboración urgente para garantizar la seguridad de los niños y del personal”, concluyó la directora.