El traumatólogo, Leonardo Santiago Furlotti, quedó imputado ayer de cometer los presuntos delitos de estafa e incumplimiento de los deberes de funcionario público. El fiscal Nicolás Schiattino y la ayudante fiscal, Roxana Fernández (UFI de Delitos Especiales) sospechan que delinquió por cobrarle $250.000 a joven en Media Agua, Sarmiento, para poder operarlo en un hospital público, lugar en el que las intervenciones quirúrgicas son gratuitas.

La víctima fue Axel Marinero, un joven de 33 años, empleado metalúrgico, que el 30 de octubre de 2024, se cortó el tendón de Aquiles jugando al fútbol; era muy deportista. Según Fiscalía, el 4 de noviembre fue internado y le transfirió a la cuenta de Mercado Pago del profesional (eso se acreditó) la suma que le pedía para ‘la sutura y el implante’; el 6 de noviembre lo operó, al otro día le dieron el alta, pero el 11 de ese mes el joven falleció.

El 17 de marzo pasado, la familia de la víctima denunció el caso a través de su abogada, Josela Echegaray Moya. Entonces la letrada pidió a Fiscalía que se investigue a Furlotti por un posible homicidio culposo y también por la posible estafa y el incumplimiento de los deberes de funcionario público.

Fiscalía dio curso a esa investigación, pero en junio pasado desestimó un posible homicidio culposo en base a informes y pericias médicas. Sin embargo dio luz verde a la imputación contra el profesional por los otros dos delitos.

Ayer, pidió a la jueza Flavia Allende que le imputen esas conductas penales, un plazo de 6 meses para investigar y que se le imponga al imputado la obligación de someterse al proceso. La abogada de la Parte Querellante solicitó, además, que se le prohibida salir de la provincia sin autorización, petición que fue aceptada por la magistrada.
Por recomendación de Francisco Furlotti, su hermano, el médico se abstuvo de dar su versión. El letrado, prometió sumar pruebas a su favor.