Aunque Sergio Uñac evitó nominar directamente al vicegobernador Rubén Uñac, como su sucesor en Pocito, el actual intendente dijo que le gustaría ver a su hermano ocupar su lugar.
"Creo que sí me gustaría, sería algo interesante, ésto comenzó con mi padre Joaquín, continuó conmigo, pero vamos a ser muy prudentes de no cansar a la comunidad, por eso hay que ser muy prudentes", analizó el jefe comunal.
El tema de la sucesión en la Intendencia estuvo tan presente ayer en Pocito como el de la sucesión de Gioja en la Gobernación.
Sergio dijo que no habló del tema con nadie todavía. "Hay muchos dirigentes que tienen expectativas que son legítimas y les he pedido que las mantengan en un campo muy íntimo para no caer en discusiones estériles que no hacen a la gestión municipal", dijo el intendente.
Pero en voz baja, en la comuna quien más suena para jugar por la Intendencia es Rubén. Lo citan como una carta importante para hacer una excelente elección, pero también valoran que es un paso político con varias lecturas salir de vicegobernador para convertirse en intendente. Algunos opinan que debería jugar para un cargo "más alto", por ejemplo el Congreso.