El Gobierno de Chile ayer dio un gesto clave que ratifica su voluntad de llevar adelante la concreción del túnel de Agua Negra. El Ministro de Obras Públicas del país trasandino aseguró que la administración de Michelle Bachelet financiará con recursos de su presupuesto la construcción de la parte que le corresponde de la megaobra, que es el 28 por ciento. De acuerdo al monto actual, implica 364 millones de dólares de un total de 1.300 millones. En un principio, los chilenos iban a enfrentar dicho costo con los fondos que se generaran a través del peaje por el futuro paso, por lo que el hecho de que ahora se hagan cargo de la financiación fue visto por el Ejecutivo sanjuanino como un espaldarazo histórico al proyecto, que ya registra varios hitos (ver Claves).
El gobernador José Luis Gioja y el ministro de Infraestructura, José Strada, estaban exultantes. Es que resaltaban que tal decisión alienta a las empresas o consorcios interesados en la construcción a presentarse en el futuro llamado a licitación, el cual está previsto que se haga antes de fin de año. “No sólo pagará Argentina, sino que hay otro país que también lo hará”, recalcó el mandatario. Sucede que la gestión kirchnerista había incorporado en el presupuesto el aval que garantiza el pago del crédito que presentará la empresa constructora que ejecute la obra. “Es una definición de mucho peso, teniendo en cuenta que Argentina ya había anunciado que iba a tomar todo el financiamiento, todo el crédito”, dijo Strada. El anuncio se concretó a través de una videoconferencia entre el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, su par chileno, Alberto Undurruga, Gioja y Strada. El viernes, el Gobernador viajará a Buenos Aires a un encuentro con autoridades chilenas, en la que hay chances de que se firme el protocolo de trabajo para la obra.