La exintendenta de Rivadavia, Ana María López, cuestionó ayer las pericias de una comisión revisora que creó la actual gestión de Fabián Martín, la cual reveló que bajo su administración desaparecieron unos 44 mil pesos en materiales para la construcción de un Centro Integrador Comunitario (CIC). La anterior jefa comunal puso en duda la actuación del equipo de investigación al señalar que no son parciales, porque se trata de actuales funcionarios y que no la hicieron participar de dicho análisis. Inclusive afirmó que no faltan insumos, ya que los tienen los proveedores o estaban en el municipio o la obra. Además, el informe dio cuenta que su hija y exdirectora de Proyectos pagó cerca de 50 mil pesos por trabajos que no se hicieron, a lo que respondió que “no me consta” y que “sólo vieron una parte”.

De esa manera, Ana María encaró su defensa y destacó que hará una presentación formal ante el municipio para contar con todos los documentos que recopiló la comisión y que, de comprobarse, recurrirá a la Justicia ante eventuales injurias y calumnias. El intendente Martín había manifestado que envió el expediente al área legal para que le recomienden los pasos a seguir, esto es, radicar o no una denuncia, una demanda o darle intervención al Tribunal de Cuentas, a lo que Ana María señaló que “estoy a disposición de la Justicia porque estoy tranquila sobre mi accionar”.

De la mano del basualdismo, Martín derrotó a la entonces jefa comunal en las pasadas elecciones y apenas asumió, posó la lupa en el manejo de los fondos de su predecesora y puso a rodar una comisión interna. Lo que primero sobresalió fue el poco avance y la sospechas de irregularidades en la obra del CIC de la Villa Seminario, un salón que iba a estar destinado a actividades sociales, educativas, culturales y recreativas. La gestión de Ana María consiguió fondos del Ministerio de Trabajo de la Nación y con recursos de la comuna compró en 2015 casi 391 mil pesos en materiales como ladrillones, hierro, cemento, grifería y cerámicos, entre otros. Luego de recopilar información de los proveedores, a través del envío de sendas cartas documentos, y de pericias contables sobre los insumos utilizados en la obra y lo que había en los depósitos, la comisión llegó a la conclusión de que no se encontró por ningún lado el equivalente a 43.964 pesos en elementos de construcción. “No me consta que haya un faltante. Nosotros dejamos los materiales, estaban acopiados o en manos de los proveedores”, resaltó. Además, cargó contra el resultado de las pericias: “de lo que me informaron, hay una planilla que no sale firmada por nadie. No sé si el que lo hizo es un especialista y encima, a mí no me convocaron para un análisis de ese tipo”.

Por otro lado, el informe remarcó que la exdirectora de Proyectos, Fernanda Herrera, hija de Ana María, le pagó cerca de 50 mil pesos a los obreros de una cooperativa por tareas que finalmente no se ejecutaron debido a que no contaban con los materiales, según los testimonios de los empleados, y que dicho monto se justificó en los avances de obra. La exjefa comunal sostuvo que “a mí no me consta, a la otra parte no le preguntaron sobre eso. No se puede tomar una decisión sobre algo que alguien dijo que le dijeron”.