Ante el insistente pedido del sector empresario, el secretario de Servicios Públicos de la administración giojista, Daniel Campos, dejó abierta la posibilidad de autorizar un nuevo incremento en el boleto de colectivos de corta y media distancia. “Es posible, no lo descarto”, aseguró sobre un ajuste de la tarifa. Desde la ATAP, entidad que nuclea a las firmas del transporte público de pasajeros, renovaron el planteo a partir de los problemas con el subsidio al gasoil y sostienen que el precio mínimo para viajar debería ser de 3 pesos, pero el funcionario casi que descartó llegar a ese valor.
El reclamo de los empresarios viene desde hace meses y el argumento que dan es que los costos del transporte -remarcan sobre todo los insumos y los sueldos de los choferes- aumentaron lo suficiente como para actualizar el precio del boleto. Pero la mayor presión la empezaron a ejercer hace dos semanas, cuando la Secretaría de Transporte de la Nación les comunicó que a partir de julio se suprime parcialmente el subsidio al gasoil que reciben del Estado para contener las tarifas del transporte público de pasajeros.
La ayuda sigue existiendo, pero desde este mes cambió el formato y los empresarios sostienen que los perjudica porque aumentan considerablemente sus costos. Antes, de los 4,15 pesos que cuesta el litro de gasoil en bomba, las firmas del transporte lo conseguían a 98 centavos. Ahora, de acuerdo a lo que dijo el presidente de ATAP, Carlos Matus, pagan 1,79 pesos por litro y la Nación les manda 2,36 pesos para cubrir la diferencia. Con el nuevo esquema recuperan a fin de año 1 peso por litro con la declaración jurada de Ganancias, pero el dirigente se quejó porque “tenemos que financiar esa plata durante 12 meses y eso nos complica”.
Hasta al problema con el gasoil, en el Gobierno habían dado señales de no estar dispuestos a habilitar un aumento del boleto de colectivos. Sin embargo, Campos se mostró flexible ayer y aseguró “lo estamos evaluando…, es posible, no lo descarto”. Por la mañana dijo que lo iban a definir entre “hoy y mañana” (por ayer y hoy), pero anoche él mismo le dijo a este diario que aún no había ninguna resolución oficial.
Desde la devaluación a esta parte, y a partir de la escalada de precios, la discusión por el valor del boleto se ha convertido en una fija todos los años. La última vez que se ajustó la tarifa fue en 2010, cuando tras una larga negociación entre la gestión giojista y los empresarios el mínimo trepó de 1,50 a 1,75 pesos.
Matus había dicho hace poco que el mínimo debería llegar a los 3 pesos, lo que implicaría una suba superior al 70 por ciento de lo que cuesta en la actualidad. Campos reconoció ayer que “ha existido un aumento en los costos del transporte, sobre todo a principios de este año”, pero al mismo tiempo aseguró que “3 pesos es exagerado, no creo que se justifique” llegar a ese precio.
Campos anunció en el inicio de este semana que iba a llamar a los empresarios por la tarifa. Según el presidente de ATAP, hasta ayer no habían sido convocados.

