Fue golpeado y le pegaron un balazo en el pecho. Luego, para no sufrir más ataques, estuvo enterrado y cubierto de cartones y nailon. Todo eso sufrió un busto de Eva Duarte de Perón tras el golpe militar de 1955 que derrocó al fundador del partido justicialista. Tras largos años, hoy será puesto en valor y exhibido permanentemente en el estado en el que se encuentra en el Hall Central de la Legislatura local, a través de un acto que se realizará a las 10.30 y que contará con las máximas autoridades partidarias, como el gobernador Sergio Uñac y el vice y presidente de la Cámara, Marcelo Lima.
La movida se encuentra en el marco del 64to aniversario del fallecimiento de Evita, el cual se cumplirá mañana. La exposición del busto tal cual está apunta a que represente un testimonio de la intolerancia política que se vivió en esa época, en la que hubo una persecución contra los militantes y todo lo que sonara a peronismo, para “evitar repetir los mismos errores del pasado”, según señala el comunicado del Poder Legislativo.
El busto fue donado por la Asociación Sanjuanina de Ex Presos Políticos y Cesanteados. Orlando Peñas, secretario de la entidad, contó que la obra estuvo hasta 1955 en el entonces partido justicialista femenino, que funcionaba en lo que es hoy la Parroquia de Guadalupe, en Desamparados. Tras el golpe, el busto fue dañado y una militante de apellido Manrique lo recuperó y ocultó en el jardín de su casa para protegerlo y no recibir ningún tipo de represalia. En tiempos políticos más calmos, la mujer lo colocó en su dormitorio. Luego, su hijo lo entregó en 2011 a la Asociación de Ex Presos Políticos, quien a su vez lo donó a la Legislatura. Ese fue el recorrido de la escultura, que ahora reposará en un lugar privilegiado en la casa de las leyes. Peñas dijo que las autoridades de la Cámara de Diputados no quisieron restaurarla para reflejar la intolerancia política de la época.
