La presidenta Cristina Fernández recibió ayer a la conducción de la CGT, encabezada por el dirigente camionero Hugo Moyano, con la que analizó un ‘amplio temario a agenda abierta‘, informaron los sindicalistas, aunque la Presidenta no quiso hablar sobre las ganancias.

En este encuentro, en el Salón de las Mujeres de la Casa de Gobierno, con el que se intentó avanzar en el Diálogo Social y que se prolongó durante una hora y media, la Jefa de Estado agradeció a la dirigencia obrera el apoyo recibido a su gestión en el masivo acto realizado el viernes último en la Avenida 9 de Julio para conmemorar el Día del Trabajador.

Los dirigentes sindicales intentaron hablar del proyecto de participación de ganancias, resistido por los empresarios, pero la jefa del Estado frenó esa embestida y prefirió recordar que el tema ‘está en el Parlamento‘.
Asimismo, aunque los voceros del encuentro, Juan Carlos Schmid de balizamientos y Omar Plaini de canillitas, reivindicaron ‘la responsabilidad y madurez‘ de los trabajadores en las discusiones paritarias, Horacio Arreceygor, del Sindicato de Televisión admitió que se habló ‘que tengamos mesura en los pedidos‘ de la puja salarial.

Lo concreto es que Cristina Fernández planteó en la reunión ‘reglas de juego mínimas‘ para sostener lo iniciado en el 2003, en tanto la CGT se explayó sobre las medidas necesarias para ‘institucionalizar el modelo‘.

‘Afuera de la región y el país está lloviendo y fuerte‘, advirtió Schmid, y puso como ejemplo que ‘en Inglaterra hubo una boda hace unos días y un mes atrás las calles estaban repletas de trabajadores que reclamaban‘. En este sentido advirtió que ‘si queremos ingresar en la etapa del desarrollo, tenemos que saber cuáles son los instrumentos, porque no será con las mismas medidas‘, advirtió.

Entre los muchos temas que el sindicalismo considera necesarios para avanzar figura el ‘sistema de salud en general‘ , aunque reconoció que señalaron en la reunión la necesidad de que ‘se apruebe la ley de prepagas‘ que está en el Congreso, también resistida por el sector empresario, pero no recibieron respuesta por parte del Gobierno.

Encabezados por Moyano, la dirigencia de la CGT se sentó durante a la mesa con la jefa del Estado y dos de sus ministros: los titulares de Trabajo, Carlos Tomada y de Economía, Amado Boudou.

La nueva ronda del diálogo social que impulsa el gobierno continuará mañana a las 18 con la UIA, aunque esta central empresaria no tiene muchas expectativas sobre resultados positivos del encuentro. Los sindicalistas dijeron que la presidenta quiere después reunirse con la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) y a las pequeñas y medianas empresas (Pymes).

Según supo DyN, la central empresaria evaluó que este tipo de diálogo sólo tendría efecto si el Gobierno promueve ‘algún gesto‘ de la CGT que baje el nivel de enfrentamiento entre ambos sectores. Pusieron como ejemplo en este sentido que los empresarios verían con buenos ojos que la central obrera dejara sin efecto el proyecto de participación de ganancias. Sin embargo, el ‘moyanismo‘ ya adelantó su negativa, aunque en el encuentro no se hizo comentarios sobre el tema.