Zulma Corso, la presidente de la obra social universitaria Damsu, con el patrocinio del abogado Cayetano Dara, presentó una denuncia en la Fiscalía de Instrucción en turno por la posible comisión del delito de defraudación. De acuerdo a una auditoría, resaltaron que a través de supuestas maniobras de afiliados y médicos, la entidad se vio perjudicada al realizar pagos de ecografías que no fueron efectuadas y al financiar un costoso remedio para una pareja que no padecía la patología descripta en la orden médica. En este último caso, el informe indica un presunto desvío de alrededor de un millón de pesos en medicamento por tres años como mínimo, señaló Dara.

No fue la única anomalía que se denunció, ya que se señaló que en la farmacia de Damsu hubo un irregular proceder por parte del encargado de Compras, Raúl Castro. Según remarca la presentación, el titular compraba medicamentos y no verificaba el stock existente y a la hora de adquirirlos, no exigía cotización a otros oferentes.

El expediente que llamó poderosamente la atención de la auditoria fue el que reveló que el afiliado Carlos Recio y su cónyuge, Adriana López, conseguían el OK para adquirir un medicamento para una patología renal crónica que, de acuerdo a las historias clínicas de Damsu, ninguno padecía. Dara señaló que, tras las consultas con especialistas, tal remedio es recetado dos veces en el año, mientras que se constató que la pareja retiró unas 16 cajas en tres meses. En la denuncia señalaron que el medicamento se utiliza en la actividad deportiva como dopaje, ya que mejora la oxigenación de los tejidos al aumentar la producción de glóbulos rojos.