La sesión de la Cámara de Senadores tuvo un desarrollo sorpresivo: había sido anticipada como una jornada tranquila, sin temas polémicos, pero el oficialismo terminó perdiendo en dos votaciones, por primera vez en mucho tiempo.

La primera derrota fue el pedido de la presencia en dos comisiones del Senado del titular de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA) para que explique el funcionamiento del organismo. El proyecto había sido pedido por el radical pampeano Juan Carlos Marino, y contó con el rechazo explícito del titular del bloque oficial, Miguel Pichetto.

Sin embargo la votación arrojó 35 votos a favor de la comparencia, contra 27 en contra.

Además, la Cámara de Senadores derogó ayer por 34 votos a favor y 26 en contra el artículo que prohíbe que el salario mínimo, vital y móvil sea tomado como referencia para la negociación de paritarias y de aumentos salariales. La norma había sido votada por unanimidad por Diputados, y ahora la Cámara alta convirtió en Ley esa modificación a la legislación laboral. El proyecto fue aprobado gracias a los votos de la oposición, en tanto que el oficialismo se negó a acompañar la medida luego de que el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, fustigara el proyecto en la Comisión de Trabajo del Senado.

La posición del oficialismo resultó incompresible porque el autor de la norma fue el abogado laboralista, Héctor Recalde.