Tras las elecciones del domingo, el Frente para la Victoria (FPV) no sólo festejó la obtención de la mayoría de los cargos ejecutivos en juego sino también haber conseguido mantener la mayoría calificada en la Cámara de Diputados. Pero al darse vuelta el resultado en Ullum y perder el legislador por ese departamento, no llegará a los dos tercios. No obstante, desde el 10 de diciembre seguirá teniendo por lejos la mitad más uno y podrá aprobar o rechazar proyectos de ley sin depender de la voluntad de los opositores.

Según el escrutinio provisorio, el oficialismo se había alzado con 10 diputados proporcionales y 14 departamentales, lo que le daba un total de 24 sobre las 36 bancas que tendrá la Legislatura en el próximo mandato. Eso significaba que, además de conseguir una amplia mayoría en el recinto, preservaba los dos tercios que tiene actualmente.

La realidad cambió ayer, cuando el recuento definitivo de la Justicia Federal con competencia electoral determinó que no obtuvo el escaño reservado para Ullum. Ese lugar quedó para el basualdismo y de esta forma, el FPV consagra 23 diputados en lugar de 24.

El oficialismo sigue estando sobrado en la cantidad de escaños para dominar del parlamento sanjuanino. La mitad más uno que se necesita para dar quórum y aprobar una ley sin ayuda ajena es 19 y con 23, alcanzó el objetivo holgadamente.

Eso sí, si el Poder Ejecutivo o el bloque oficialista impulsan una ley de carácter decisorio o la donación de un inmueble, por ejemplo, no la podrán aprobar si no consiguen el aval de, al menos, un legislador opositor. Para ese tipo de normas hace falta los dos tercios, que en este caso implican 24 manos levantadas, es decir una más de las que tendrá el FPV.

De los 36 diputados que habrá en la próxima gestión, 19 son departamentales y 17 proporcionales. Queda por contar la mayoría de las categorías que se pusieron en juego el 25, pero tanto en el oficialismo como en la oposición dicen que es muy poco probable que las cosas cambien respecto a las cifras que dejó el escrutinio provisorio. Y aún cuando exista algún ajuste, es improbable que el FPV pierda la mayoría simple que revelan hasta el momento los resultados de las generales (Ver infografía).

Si efectivamente se confirman los números del primer escrutinio, el FPV se quedará con 23 bancas y las demás se repartirán entre dos fuerzas políticas de la oposición. El Frente Compromiso con San Juan, con el basualdismo como principal socio, se llevará 11 (5 proporcionales y 6 departamentales) y el frente lectoral que conforman el macrismo, el radicalismo y Dignidad Ciudadana obtendrán las otras 2 (ambas son proporcionales).

Con esta marca, desde su nacimiento, el basualdismo logra su mejor performance en las urnas para los cargos legislativos. Logra meter 1 diputado más que en el año 2003, cuando consagró 10 legisladores provinciales, aunque meses después sufrió una sangría que terminó con cinco de sus legisladores incorporándose a las filas del giojismo.

Otro dato significativo es que Dignidad Ciudadana tendrá representación parlamentaria por primera vez, a través de Fernando Moya. Además, la Unión Cívica Radical volverá a contar con un diputado después tres mandatos consecutivos de sequía.