La mega obra del nuevo Canal Sarmiento, que tiene un presupuesto base de 78 millones de pesos, le permitirá al departamento homónimo aumentar en un 40% la superficie bajo riego: A las actuales 9.000 hectáreas sumará, una vez que esté terminada la obra, 3.800 hectáreas más, permitiéndole desarrollar y apuntalar su fuerte perfil olivícola y vitivinícola.
Con la actual sección que tiene el cauce del canal, que se inauguró en el año ‘67 y que quedó en gran parte destrozado con el terremoto del ’77 (ver aparte), permitía originalmente conducir por su traza unos 9 m3, pero por los daños quedó acotado a sólo 3 m3 -es lo que lleva como máximo en la actualidad- y mucha del agua debe ser derivada por un colector de tierra que va paralelo. En total, son 16,5 kilómetros a nuevo los que se ejecutaran, empezando por el Gran Comparto donde llega el Canal Céspedes.
Las autoridades calculan comenzar con la obra hídrica a principios del mes de diciembre, teniendo un plazo de ejecución de 24 meses
Con la obra del nuevo canal se multiplicará la capacidad de conducción de agua casi 5 veces, llegando así a los 14 m3. Ese caudal que va a conducir el nuevo canal para regar en un futuro un total de 12.800 hectáreas, equivale a unas 16 veces más de agua que lo que consumen todos los empredimientos mineros -Veladero, en Iglesia; Gualcamayo, en Jáchal y Casposo, en Calingasta- radicados en la provincia o también 5 veces más que el consumo de agua potable diario de San Juan, según estimó Héctor Llera, coordinador de la unidad ejecutora del Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (Prosap). Ayer en Casa de Gobierno se conocieron las 6 ofertas económicas (ver recuadro) de la obra, que cuenta con el financiamiento del Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (Prosap), donde la provincia toma un crédito del Banco Mundial con un plazo de 30 años; ecuación con la que ya ejecutaron las refacciones del Canal del Norte por otra cifra millonaria.
“Estamos llevando más allá la frontera agrícola del departamento. Esto permitirá desarrollar zonas que hoy no pueden tener el recurso, pero lo más importante es que es una obra que evitará perder agua. Agua que hoy se filtra, trae problemas y esa es agua que no genera desarrollo”, comentó el intendente departamental, Alberto Hensel. El departamento Sarmiento es un polo agrícola con fuerte crecimiento, siendo el más importante en superficie plantada con olivos y el segundo en la provincia en materia vitivinícola. En este sentido, la coordinadora técnica del proyecto, Marta Paz, fue más allá: “Hace fácil 40 años que no se hacía a nuevo una obra hídrica de canales de estas características, el único antecedente fue la gran refacción del Canal del Norte -terminó la obra a mediados del 2009-. Ahora se está utilizando la misma traza, donde vamos a cambiar la sección actual que tiene el Canal Sarmiento -será rectangular y no en forma de “V”, como es el viejo- para ganar bastante en capacidad y conductividad”.