Carlos Malatto, militar argentino que se fugó a Italia en 2011, afrontará desde este lunes en ese país en el que buscó refugio un proceso judicial: está acusado de 8 asesinatos y desapariciones. Lo juzgarán por delitos de lesa humanidad.

En 2010, el juez federal de San Juan, Leopoldo Rago Gallo, ordenó la indagatoria de Malatto y su detención, pero un año después la Cámara de Casación la dejó sin efecto la orden. Malatto se fugó a Chile en 2011, cuando se filtró que había una orden en su contra.

Al menos hasta el año 2000, y beneficiado con la ley de obediencia debida, el teniente coronel Malatto estuvo a cargo del área de Relaciones Humanas de la Octava Brigada de Infantería de Mendoza y vivía en la calle Sánchez, de Godoy Cruz.

Logró pasar la frontera con su pasaporte italiano pese a que pesaba sobre él una prohibición de salir del país y esto no quedó registrado en Migraciones. Luego viajó a Italia, donde vive con su doble nacionalidad.

Malatto fue segundo jefe en San Juan e iba a ser enjuiciado en esta provincia en 2011. Italia rechazó su extradición. Pese a ello, una organización de derechos humanos local no se rindió. Contactó a familiares de víctimas e insistió ante la justicia local que tomó el caso.

Malatto era miembro de la plana mayor del RIM 22 y fue fundamental para gestionar la relación entre el Ejército y la Policía de San Juan, desarrollando tareas en lo que denominaron Plan Cóndor. Era considerado un hombre de profunda confianza de Juan Carlos Olivera, quien fue condenado a perpetua por más de 50 crímenes de lesa humanidad que se le confirmaron durante juicio.

Acusado de al menos 8 asesinatos, incluido el de la modelo Mari Anne Erize

A Malatto se le adjudican al menos 8 asesinatos, entre los que había activistas, estudiantes y líderes políticos, incluyendo a Daniel Rodolfo Russo, Florentino Arias, Ángel José Alberto Carvajal (quien era en ese momento secretario del Partido Comunista de San Juan), Marie Anne Eize (modelo y militante montonera de nacionalidad francesa), Carlos Cámpora (entonces rector de la UNSJ), Lerouc, Jorge Alberto Bonil (militante de la Juventud Universitaria Peronista) y Marta Saroff.

El de Marie Anne Erize es de los casos más resonantes. Hija de padres franceses, fue modelo profesional y hasta llegó a ser tapa de Gente y Siete Días. Sin embargo dejó las pasarelas y se dedicó al trabajo social que desarrolló en San Juan. Su pareja, Daniel Rabanal, era militante de Montoneros.

Francoise, su mamá, la fue a buscar a San Juan para tratar de convencerla de que dejara el país y ella le respondió: “Pero yo no hice nada. No soy una terrorista. No formo parte de la agrupación. Sólo quiero ser pobre entre los pobres”.

Tenía 24 años cuando desapareció. En los juicios de lesa humanidad en San Juan se supo que uno de sus verdugos, el mayor del Ejército Jorge Antonio Olivera, se jactaba de haber “violado a la francesita”.

Detenido en San Juan, Malatto fue liberado por la Cámara de Casación Penal en 2010, escapando a Chile y posteriormente a Italia un año después, donde fue encontrado por medios locales en diciembre del 2019.

En 2014, la Justicia nacional emitió un pedido de detención internacional en su contra, pero la Corte Suprema de Casación de Italia rechazó la solicitud de extradición basándose en que el delito no estaba tipificado en el código penal italiano. Sin embargo, en 2016, la Justicia federal de San Juan emitió otro pedido de captura, agregando 18 nuevos homicidios, y en 2019 se sumó otra solicitud que involucraba a cinco víctimas más. Con estos nuevos datos, la Justicia italiana decidió abrir el caso y comenzó con la fase sumarial, donde los fiscales recopilaron pruebas para determinar si Malatto podía ser juzgado.

La etapa de investigación, que inició hace siete años, finalizó semanas atrás. Ahora, el ex militar de 74 años está a nada de ser juzgado y condenado por los crímenes cometidos en San Juan y en Mendoza durante una de las épocas más oscuras de la historia argentina.