En su visita a la mina subterránea del emprendimiento Casposo, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, cubrió de elogios a la minería por los efectos positivos que tiene con respecto a la generación de fuentes de trabajo, capacitación del personal y liquidación de divisas que quedan en el país. En un discurso fuertemente político, el funcionario kirchnerista comparó la actividad con la que llevan adelante los productores de soja, a quienes calificó de mezquinos e irresponsables, ya que en la práctica, los acusa de retener su stock y no vender los granos en el mercado externo, lo que priva el ingreso de dólares.

La puja con el sector sojero se debe a que, según datos que manejan desde la Nación, de los 55 millones de toneladas de granos de la cosecha 2014, hay más de 27 millones guardados en silobolsas que representan 10.000 millones de dólares que no entran al país. Los analistas del sector sostienen que los exportadores retienen la mercadería a la espera de un mejor precio internacional de la oleaginosa o a un valor más alto del dólar en la plaza local, a través de una devaluación.

De Vido estuvo ayer unas horas en la provincia para el cuarto aniversario de la primera colada que produjo la mina calingastina y por el traspaso de la etapa de explotación a cielo abierto a su fase subterránea. El ministro realzó la minería y la puso como ejemplo para criticar a la producción sojera. Resaltó que ese sector “ha liquidado muy mezquinamente la cosecha” de este año. “Ahí no hay una actividad responsable. Sí lo es la minería, que genera puestos de trabajo, que este año ingresará 100 millones de dólares al país, que activa cámaras de servicios, que genera procesos de capacitación del personal, que sigue explorando y como en Casposo, que sale de una explotación abierta a una mina subterránea. Es tan irresponsable el que explota un campo con mezquindad, sin poner a disposición las divisas que el país necesita, como aquel que lleva adelante un emprendimiento minero desatendiendo el medio ambiente”. En ese sentido, dijo que la minería que se está desarrollando en la provincia es “absolutamente sustentable” y resaltó que “nosotros no somos falsos profetas como algunos políticos de Capital Federal, que vienen a pronosticar el apocalipsis sobre la base de la actividad minera. Nosotros creemos en una minería responsable”.

Así, el acto se caracterizó por reforzar el valor que tiene la actividad. El gobernador José Luis Gioja destacó que la empresa Troy Resources (que opera el yacimiento) haya continuado con su plan de inversiones, lo que llevó a que haya 700 empleados. “Nos sentimos bien cuando los empresarios que vinieron a apostar a San Juan y al país, lo sigan haciendo y continúen confiando”. Además, manifestó que “estamos convencidos de que esto es desarrollo sustentable. La peor contaminación en Argentina y en el mundo, es la pobreza, el subdesarrollo, la falta de trabajo y de oportunidades. Por eso, en San Juan vamos a seguir apostando a la actividad, porque con esta herramienta hemos podido transformar la provincia”.

Por su parte, Andrew Storrie, CEO de la compañía, señaló que “la industria minera no es fácil. Esto ha sido doblemente difícil, ya que el mercado actual de los minerales no está pasando por un buen momento dado que el precio del metal ha caído al mínimo en los últimos 5 años. Sin embargo, Troy Resources espera seguir trabajando estrechamente con el Gobierno y con su apoyo para asegurar que el proyecto siga siendo seguro, rentable y que se den las condiciones para seguir invirtiendo en él”.