En altas esferas del partido que lidera Mauricio Ibarra dejaron abierta la posibilidad de armar una colectora y llevar a Cristina Kirchner como candidata a presidente en las elecciones de octubre. Todo se debe a un planteo que un importante sector interno de militantes le hizo al actual diputado nacional, a partir de la resistencia que genera la figura del radical Ricardo Alfonsín y la falta de sincronismo con el basualdismo por acordar un espacio común para promover un postulante del Peronismo Federal. Si se da, sería la vuelta al kirchnerismo y un giro de 180 grados en la línea política que decidió seguir el ex intendente de Rawson desde que se fue del PJ local.
El partido que lidera Ibarra es Convicción Federal y hoy, como el resto de la oposición sanjuanina, está involucrado en aceleradas conversaciones por armar un frente electoral para las internas de agosto y las generales de octubre; y el plazo límite para hacerlo es el 26 de este mes. Las opciones para darle pelea al giojismo son varias y, de acuerdo a lo que dijeron en el entorno del rawsino, una de ellas es llevar a la actual Presidenta en la boleta.
Fuentes calificadas dijeron que la idea la impulsa un numeroso grupo de dirigentes y militantes con peso en Rawson, en donde el partido tiene su principal capital político. Se lo hicieron saber hace poco a Ibarra. Y surgió como alternativa al plan original de jugar con un candidato a presidente antikirchnerista, para seguir por el mismo camino que transita el ex intendente desde 2009.
Pasa que la idea inicial de acordar con Roberto Basualdo para llevar una figura de corte opositor -el que saliera del Peronismo Federal o Mauricio Macri, que finalmente se bajó-, en los últimos días se vio debilitada. Ibarra salió a acusar al senador de no consultar son el resto de sus posibles socios una batería de anuncios que tiró en tono de definición innegociable: que no será candidato a gobernador, que intentará renovar su banca y que le pone todas sus fichas a Alberto Rodríguez Saá.
A partir del distanciamiento de Basualdo, se empezó a hablar de apoyar la candidatura de Eduardo Duhalde, con quien hubo un acercamiento a través del vicegobernador mendocino Cristian Racconto, o confluir con el bloquismo disidente y Actuar en el espacio que lidera la UCR con Alfonsín de candidato. Pero, según las fuentes, internamente especulan que el bonaerense se bajará y, por otro lado, la militancia no está dispuesta a digerir la idea de hacer campaña por un radical.
Ibarra y los dirigentes que lo acompañan, como el intendente Gustavo Rojas, evalúan no sólo los efectos electores, sino también los políticos. El diputado nacional, apenas se peleó con el giojismo y abandonó las filas del PJ, asumió una posición crítica al gobierno nacional y en el Congreso se integró al bloque opositor del Peronismo Federal. De ahí que no desconoce que retomar la senda que militó hasta 2009, sería un viraje pronunciado que lo pondría a contramano de lo que viene diciendo.
Entres los electores, hay elementos que Ibarra y el resto de la militancia tampoco pasan por alto. La principal referencia de Cristina en San Juan es José Luis Gioja e interpretan que no sería sencillo sumar votos por el efecto del arrastre de la jefa de Estado. Además, dijeron cercanos a Ibarra, se especula que César Gioja podría armar otra colectora por Cristina y no hay voluntad de compartir nada con él.
Ayer, apareció una nueva alternativa que no había sido explorada. Ibarra analiza por estas horas el modelo de Busti en Entre Ríos. El ex mandatario se alejó de Duhalde, le quitó el apoyo y para evitar compromisos nacionales, armó un frente provincial que no llevará candidato a presidente.
Con Basualdo jugado con el gobernador puntano y la UCR definida por su candidato propios, a los que les cabría esa posibilidad son Actuar y el bloquismo disidente. En el primero señalaron que sería la última opción y en el espacio que encabeza Enrique Conti no lo dieron por descartado, aunque opinaron que lo mejor sería lograr un frente amplio con referencia nacional.