El candidato a gobernador bonaerense por Unión para el Desarrollo Social, Francisco De Narváez, y el candidato a presidente por Compromiso Federal, Alberto Rodríguez Saá, mantuvieron ayer un encuentro privado, en el marco de conversaciones que mantienen de cara a las elecciones de octubre.

De Narváez y Rodríguez Saá hicieron ayer un alto en sus respectivas campañas electorales para reunirse y analizar la reorganización de los peronistas díscolos, luego de que el alejamiento de Felipe Solá confirmara la atomización del Peronismo Federal (PF).

Solá reapareció en la escena política luego de meses de silencio para reconocer que se alejó del PJ disidente y ahora es ‘independiente‘ porque ‘dejó de sentirse parte de la oposición‘. Referentes de la oposición coincidieron al criticar el distanciamiento del ex gobernador bonaerense, quien luego de las elecciones primarias intensificó sus contactos con Daniel Scioli.
La salida de Solá del PF evidencia la casi definitiva atomización de un espacio que nació con el objetivo de agrupar a los peronistas con disidencias al kirchnerismo. El ex gobernador bonaerense advirtió que el Peronismo Federal ‘se deshilachó porque hubo posiciones personales que prevalecieron‘.

De Narváez y Rodríguez Saá mantienen desde hace días conversaciones respecto a la necesidad de ponerse al frente, después de las elecciones generales del 23 de octubre, de una convocatoria para reorganizar a los peronistas díscolos. En ese contexto, ambos dirigentes mantuvieron ayer su primer encuentro, en La Matanza (Buenos Aires), en el que también analizaron las declaraciones de Solá.

Al respecto, fuentes del denarvaismo indicaron a la agencia de noticias DyN que el diputado y el gobernador de San Luis coincidieron en la necesidad de crear un sector dentro del PJ. La reunión se llevó en el Bar Tokio. “La reunión duró 40 minutos y charlaron sobre la reorganización del PJ y de cómo se va a reacomodar el peronismo después de octubre”, señalaron las fuentes.

Ambos sectores están a la espera del fallo de la Justicia que sostenga o rechace la candidatura a gobernador bonaerense de Adolfo Rodríguez Saá, cuestionada por su legalidad. “Si Adolfo no puede ser candidato, habrá otra reunión con miras a ver si se apoya la candidatura de De Narváez”, agregaron.

En declaraciones radiales, Solá dijo que dejó de sentirse parte de ‘la oposición dura cuando murió Néstor Kirchner‘. A su vez, elogió los ‘aciertos‘ del Gobierno nacional y se mostró dispuesto a ‘colaborar‘ con el gobernador bonaerense Daniel Scioli.

Frente a las declaraciones de Sola, el diputado nacional por San Juan, Mauricio Ibarra, no respondió ante los insistentes llamados telefónicos para que se expresara al respecto. Ibarra brindó en la provincia un respaldo clave a Solá cuando éste empezó su carrera por la presidencia. Con esta nuevo posicionamiento de Solá, resta saber cual será la figura política que tendrá Ibarra como referente nacional.