Como parte de la llamada megacausa de las expropiaciones, la ex perito de la Fiscalía de Estado Ana María Melvin iniciará una querella por injurias y calumnias contra la ex jueza Victoria Myriam Bettio. La ex magistrada había sostenido, en declaraciones a El Nuevo Diario, que Melvin le confesó en su despacho que estaba presionada para fijar precios más altos de los terrenos que le tocaba tasar. La ex perito sostiene que eso no es cierto, que no estuvo con Bettio y que con su actitud la ha "desacreditado y deshonrado". Se trata de la cuarta causa judicial que se dispara a raíz del escándalo de las expropiaciones (ver aparte).
Por este enfrentamiento, incluso, Melvin y Bettio fueron convocadas ayer a un careo dispuesto por la titular del Quinto Juzgado de Instrucción, María Inés Rosselot, en el que ambas mantuvieron sus dichos. La ex jueza insistió en que la perito le había contado llorando en su despacho que estaba presionada por el abogado Santiago Graffigna y por el ex fiscal de Estado Pedro Quiroga, ya fallecido, para inflar el valor de un inmueble expropiado para construir el dique Cuesta del Viento. Y Melvin mantuvo su postura negando el encuentro.
Por eso, con el patrocinio de la abogada Yanina Olmos Bustos, cuando terminó el careo, presentó la querella en el Quinto Juzgado Correccional e hizo reserva para iniciar una acción por daños y perjuicios en sede civil.
De confirmarse los dichos de Bettio, sería una pieza clave en la investigación judicial que apunta a confirmar la sospecha del Gobierno de que una red de abogados, jueces y funcionarios actuaba en conjunto para inflar el valor de los terrenos expropiados.
Ambas mujeres, por separado, habían sido citadas por la jueza para que explicaran sus versiones de los hechos cuestionados y cuando surgieron las diferencias, la magistrada dispuso el careo para tratar de determinan quién dice la verdad.
La ex perito, encargada de tasar los terrenos que adquiría el Estado, está en el ojo de la tormenta porque no es la primera vez que alguien sostiene que tuvo responsabilidad en los altos valores que se fijaban para las tierras que iban a ser expropiadas. El primero fue el perito de Fiscalía de Estado Roberto Nievas, quien declaró en la causa que Melvin le había dicho que tenía un arreglo con Graffigna, el abogado sospechado de haber armado maniobras para sacarle plata adicional a las arcas públicas. El otro fue Héctor Carelli, ex jefe del área Expropiaciones en el mismo organismo, quien dijo estar al tanto del supuesto acuerdo Melvin-Graffigna.
Las tasaciones son vitales en un proceso de expropiación, porque es el valor de referencia que toma el juez del caso para fijar el precio final que debe afrontar la Provincia. Intervienen en el trámite un perito de la Fiscalía, otro del Tribunal de Tasaciones y otro de la parte expropiada.

