A través de una acción judicial, Fiscalía de Estado, el órgano que defiende el patrimonio de la provincia y que conduce Jorge Alvo, busca recuperar unos 3.000 metros cuadrados de la Escuela de Enología. La presentación, una demanda de reivindicación iniciada en el Juzgado Contencioso Administrativo, apunta a que una familia abandone el predio ubicado en el cruce de Paula Albarracín de Sarmiento y Colombia, en Capital, que ocupa desde la década del "60 y en el que construyeron una casa sismorresistente de dos pisos, a la vez que cuenta con cinco departamentos de 60 metros cuadrados, un lavadero, una gomería, un taller metalúrgico y un parripollo. La medida se gestó luego de que la Escribanía Mayor de Gobierno corrigiera un error y anulara una resolución de 1996. Con el cambio, los terrenos volvieron a ser de dominio público, por lo que no pueden estar en manos privadas.

La demanda de reivindicación está dirigida a Rosa García "y todo otro ocupante del inmueble en cuestión". La razón por la que va destinada contra la mujer es porque ella y su marido, Agustín Miranda, no cuentan con ningún "permiso administrativo a favor" por parte del Estado, por lo que "se encuentran ilegalmente ocupando el predio". Además, según la demanda, García intentó quedarse con el lugar que ocupa en dos oportunidades: hace dos años, cuando intentó escriturar el terreno, trámite al que se opuso la provincia y luego la mujer desistió de continuarlo. Y después, en marzo de este año, cuando se inició una mensura por prescripción adquisitiva de dominio, que se hace cuando se habita un lugar por más de 20 años. En el conflicto había otra familia en otro lugar que se fue sin problemas.

Por otro lado, en Fiscalía sostuvieron en el escrito presentado en el Contencioso Administrativo, a cargo de Adriana Tettamanti, que García "manifestó que sabe que el inmueble es de propiedad del Gobierno", declaración a la que "se suma la de su esposo", quien sostuvo lo mismo al indicar que viven en ese lugar porque su suegro "fue contratado en los años "60 para que cultive los parrales del predio".

Ante esa situación, las partes fueron a una audiencia de mediación en la que, según señala Fiscalía, la familia "persistió en su actitud remisa y reticente a la restitución del terreno, lo que obligó a que se diera por fracasada la instancia". Por eso, le pidieron a la Justicia que "ordene la restitución de la fracción del terreno ocupada", ya que su tenencia implica "una verdadera afectación sobre un bien de propiedad de la provincia".

La pelea legal por el predio se dio a conocer a principio de año, luego de una publicación de DIARIO DE CUYO. En su momento Miranda, el esposo de García, había explicado que su suegro, Cristóbal García, se había instalado en ese predio en la década del "60 porque llegó a un acuerdo con el director de la escuela. El trato consistió en que Cristóbal podía instalarse a cambio de que cultive 12 hectáreas de parrales. Fue entonces que el hombre se instaló allí, levantó un rancho de adobe y cultivó el predio para la escuela que, como forma de agradecimiento, le permitió que vendiera frutas y verduras. Con el paso del tiempo, forjó una familia y Miranda se casó con una de las hijas. El matrimonio es el que levantó una serie de edificaciones, como una casa y departamentos. El director del establecimiento educativo actual, Sergio Moreno, viene quejándose del avance de Miranda, ya que asegura que el hombre se está quedando con más porciones del terreno.

Inmueble histórico

En la demanda, Fiscalía de Estado destacó que la fracción del inmueble en disputa "tiene una significativa valoración en la tradición educativa sanjuanina", porque la escuela fue creada por "nuestro ilustre maestro Domingo Faustino Sarmiento".

Cambio

24 Fueron los años que transcurrieron de un error administrativo de la Escribanía de Gobierno de entonces.

Historia


La "Escuela de Fruticultura y Enología" fue creada el 7 de septiembre de 1862 por Domingo Faustino Sarmiento cuando era gobernador de San Juan, funcionando en un principio como "Quinta Normal Agrícola de San Juan". En sus orígenes, ocupó el predio de tres manzanas que fueron propiedad de la familia Ortega, ubicado donde hoy está la Plaza Laprida y su zona aledaña. Luego, en el año 1865, la Quinta fue trasladada a la zonda de Desamparados, donde actualmente se emplaza.

A instancias del ministro de Gobierno, Segundino Navarro, se reorganizó en 1884. En esos años, se adquirieron nuevos terrenos y se la transformó en la "Quinta Agronómica Modelo". Poco a poco comenzaron a realizarse diversas tareas tales como viveros, viñedos y la bodega modelo, todo en un terreno que llegó a ocupar 27 hectáreas. En 1905, la Quinta sumó la escuela, dirigida por el ingeniero agrónomo Leopoldo Suárez. En el año 1938 se llamó Escuela de Fruticultura en Industria de la Fruta. A cambio de los terrenos que ocupaba el vivero (donde actualmente está el Palomar de la UNSJ) que pasaron a la casa de altos estudios, se expropiaron otras fincas y en la década del "40, los terrenos sobre Avenida Libertador, en donde ahora está la Casa de Gobierno. Tiempo después, un sector de la escuela se destinó a la Gobernación y en los años "60 se expropió otro sector del establecimiento para la apertura de la Avenida de Circunvalación.