La ministra de Seguridad de la Nación, Nilda Garré, manifestó sus diferencias con las políticas de seguridad de la Provincia de Buenos Aires, al cuestionar al gobernador Daniel Scioli, asegurando que “no hubo continuidad” en la decisión de “ejercer el control político” sobre la Policía provincial, y alertó que si se negocia sin tomar “las riendas del problema” se “contribuye a la corrupción de algunos sectores de las fuerzas”.

En ese marco, la ministra exaltó la labor ejercida por los ex ministros bonaerenses de Seguridad Juan Pablo Cafiero y León Arslanián, que antecedieron a Carlos Stornelli y al actual titular de esa área, Ricardo Casal.

Además, la funcionaria ratificada el martes pasado en su cargo por la presidenta Cristina Fernández, rechazó que pueda haber en el corto plazo traspaso de fuerzas federales a la Ciudad de Buenos Aires, aunque destacó que con el Gobierno porteño “estamos tratando de tener una convivencia lo más sensata, racional y lógica posible para beneficio de los vecinos”.

En declaraciones por Radio Del Plata, Garré destacó que los ex ministros de Seguridad bonaerenses Cafiero y Arslanián hicieron ‘esfuerzos muy serios‘ para producir cambios y controlar a la policía provincial. Pero -denunció- ‘no hubo continuidad lamentablemente en esas tareas‘. ‘Yo creo que se había avanzado, la continuidad es fundamental y una vocación irrenunciable de ejercer el control político de las fuerzas‘, amplió Garré.

Así estas críticas forman parte de una nueva embestida de la ministra contra la política de seguridad del mandatario bonaerense y contra la disputa que mantiene con su par bonaerense, el también ratificado en ese distrito, Ricardo Casal. Fuente: DyN