San Juan.- El intendente de Caucete va de escándalo en escándalo. Esta vez, con la AFIP luego de que escuchas telefónicas revelaran que Pedro Bustos, proveedor del municipio, le pidiera facturas truchas por miles de pesos al presunto cabecilla de la red delictiva para justificar gastos de la actual gestión caucetera.
Al ser consultado por el tema, Julián Gil se desentendió totalmente del asunto. ‘Desconozco el tema. En mi gestión nosotros tenemos un equipo contable donde todo aquel que realiza un trabajo, un servicio, una venta o una prestación, presenta una factura que es inmediatamente ingresada al sistema para ver si la persona puede facturar legalmente. Es un sistema de control estricto. Dudo seriamente de esto. Es imposible que ingrese una factura trucha’, sentenció en diálogo con Radio Sarmiento.
Gil dijo desconocer a Claudio David Díaz Tascheret y Javier Taillant, los proveedores que aparecen en las escuchas e insistió en que ‘las facturas tienen que estar aceptadas por la AFIP’. ‘Quien prestó un servicio cobró su servicio. No se puede facturar a nombre de otro. Los controles son estrictos’, insistió.
Además, el mandatario municipal dijo que le iniciará acciones legales a Bustos.