La distancia entre uno y otro quedó en evidencia. La apertura de la Fiesta Nacional del Sol juntó ayer en la noche circunstancialmente a José Luis Gioja y Mauricio Macri, que apenas intercambiaron un par de apretones de manos ante las atentas miradas que se posaron sobre ellos. El líder del PRO vino a hacer campaña con vistas a las elecciones de este año y el Gobernador se lo reprochó: “me parece que es desubicado hacer actividad partidaria en una celebración que es de todos, de toda la gente”.

La estadía de Macri en estas tierras y la reacción oficial habían despertado expectativas, fundamentalmente, por las circunstancias. Pasa que además de sus aspiraciones presidenciales para 2015 y ser uno de los más ácidos opositores a Cristina, este año se disputa una elección clave y eligió hacer pie en una provincia de gobierno oficialista y justo con la máxima fiesta sanjuanina en marcha.

Los referentes locales del porteño habían anticipado que venía en su doble rol: a mostrar su gestión de jefe de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en la fiesta y a hacer campaña electoral como dirigente partidario de la oposición. Y, apenas bajó del avión, él mismo lo ratificó. “Estoy acá por las dos cosas”, dijo.

Sus declaraciones no cayeron para nada bien en la humanidad giojista. “Ah, bueno… nosotros siempre recibimos a todos y no le cerramos las puertas a nadie, pero me parece que es desubicado… es algo que está fuera de la oportunidad”, tiró el Gobernador molesto. Así todo, no se salió del libreto que reza el protocolo y cuando llegó al Parque de Mayo para el acto de apertura de la fiesta, frente a una lluvia de flashes, lo saludó.
Rodeado de colaboradores, el sanjuanino le estrechó la mano y de inmediato volvió a su lugar. Macri esbozó una sonrisa, en una situación que denotó más incomodidad que otra cosa.

Aunque Gioja, para remarcar que “no le cerramos las puertas a nadie”, cuando pronunció su discurso, le agradeció al opositor por su presencia, al igual que al embajador uruguayo en la Argentina y a la comitiva chilena que llegó desde la Cuarta Región interesada en el Túnel de Agua Negra. Durante el acto, estuvieron a varios metros de distancia y no cruzaron miradas ni un momento. Sólo se volvieron a encontrar cuando el Gobernador terminó de hablar y Macri se acercó para saludarlo con la mano extendida.

Tras el mutitudinario acto que se realizó frente al Museo de Bellas Artes, Macri tenía previsto recorrer el predio ferial con el equipo que lo acompañó y que un grupo de promotoras entregaran folletos con las actividades culturales de su gestión al frente de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Más temprano, se dio tiempo para caminar por el departamento Rawson acompañado de cerca por quien quiere que sea su candidato local para la contienda octubre en las urnas: Eduardo Cáceres.

Minutos después de llegar a la provincia, en la sede que el PRO tiene sobre calle Santa Fe, Macri habló con DIARIO DE CUYO y elogió la administración giojista a partir de los que revelan las cifras económicas. “Uno ve los indicadores y no puede negar que creció el doble que el país, algún mérito habrá tenido”, aseguró en alusión al Gobernador. Aunque aclaró que “sigue habiendo una deuda de pobreza muy alta y falta mucho por hacer”.

Sobre si el momento y el contexto que eligió para desembarcar en San Juan para hacer campaña, el expresidente de Boca aseguró que “no debería traer ningún tipo de problemas” y en dirección al oficialismo, sostuvo que “los equivocados son ellos, que dividen, que confrontan”.

La intención del macrismo es reeditar en San Juan la sociedad que selló en 2011 con el basualdismo y el ibarrismo y el líder partidario tomó el convite que hizo Roberto Basualdo de hacer internas para definir los candidatos. “Sería una lástima privarnos de un debate sano entre más de un candidato que crea en la renovación política y de la Argentina sobre todo”.

Uno de los condicionantes que la dirigencia local reconoce para lograr un armado que aglutine a toda la oposición es el alineamiento nacional, es decir a qué bloque se integrarán el o los candidatos que eventualmente sean electos. Macri lo minimizó y dijo que “lo importante es que estemos todos de acuerdo en el rechazo a la reforma de la Constitución y la re-reelección”.

Es la primera vez que el PRO sanjuanino recibe la visita de su líder desde que fue intervenido a raíz de los fuertes enfrentamientos internos. El dirigente aseguró que “no entiendo por qué las peleas” y aprovechó para darle un espaldarazo a Hugo Ramírez, quien era el presidente hasta que se resolviera que Eugenio Burzaco fuera el interventor. “Yo confío en Hugo y creo que debería volver a ser el conductor en la provincia”, señaló.