En Rawson no hay trámite de ayuda social, por complicado que sea, que esta mujer con una discapacidad motriz que le impide caminar desde los 4 años, no pueda realizar. Desde obtener la tarjeta social, la Asignación Universal por Hijo, un par de anteojos, gestionar un subsidio o algo un poco más complicado, como acceder a una pensión nacional, son cuestiones que Graciela Del Castillo (47) maneja a la perfección y que con su intervención se hacen mucho más sencillas para obtener.
Graciela, a quien la poliomielitis la obligó a movilizarse con una silla de ruedas, es la candidata a concejal en séptimo lugar del Frente para la Victoria en Rawson, que lleva a Juan Carlos Gioja de candidato a intendente.
Pero su enfermedad, y el hecho también de tener una hija con capacidades especiales por una rubéola padecida durante el embarazo, no han sido obstáculos para llevar una vida muy activa y de militancia tanto política como social desde muy joven.
De familia de cuna justicialista, porque su padre ya era seguidor de Perón y Evita, con 17 años empezó a militar en el justicialismo de Rawson y después llegó a presidir la unión vecinal de su barrio, el Malvinas Argentinas. Pero como allí no lograba canalizar sus ganas de ayudar a la gente fundó la Asociación Civil Malvinas Argentinas, en la que empezó con apoyo escolar a los chicos, la copa de leche, talleres de pinturas y tejidos para las mujeres y de salida laboral para los hombres. Y siempre con la mirada puesta en las personas con capacidades especiales.
‘Siempre noté que la discapacidad era un área muy sensible y que necesitaba de una ayuda especial‘, dice Graciela.
La charla se interrumpe varias veces porque algún colaborador le recuerda de algún pedido que tiene que tramitar o de alguna gestión que tiene que completar. Y a todos responde con una sonrisa que no pierde en ningún momento.
En lo político militó junto al desaparecido José Ubaldo Montaño y después vino su primera candidatura política cuando en la provincia se implementó la Ley de Lemas. Fue candidata a concejal en primer término de una lista que llevaba de postulante a intendente a Silvio Muñoz. Pero no tuvo suerte. Pero lejos de dejar alguna actividad, siguió en lo suyo con más fuerza que nunca.
En el 2003, ya con el justicialismo en el poder, empezó su militancia en el Espacio Segunda Reconstrucción de San Juan y su tarea con el diputado nacional Juan Carlos Gioja.
‘Juan Carlos es una persona con un gran corazón y con una profunda sensibilidad por los problemas de la discapacidad‘, sostiene Graciela. Y aclara que su tarea actual se debe a un pedido especial del legislador nacional, quien le encomendó dedicarse a las tareas sociales.
De hecho, la mujer colabora con el legislador nacional, pero realiza su trabajo en el Centro de Abordaje Territorial Rawson, que depende del Ministerio de Desarrollo Humano de la provincia, y que funciona en la calle Vidart, pasando Boulevard Sarmiento.
En el centro se dicta cursos de capacitación, por ejemplo, de lenguaje de señas, de higiene y seguridad industrial y otros con inmediata salida laboral, como un curso para mozos que se está impartiendo en la actualidad.
Pero el fuerte de Graciela no son los cursos, sino las gestiones. Desde pedir un turno para que la persona sea recibida por un funcionario hasta armar un expediente para un subsidio a una institución, todos son trámites que la mujer maneja al dedillo.
‘Hay gente que no lo sabe, pero las personas con capacidades especiales pueden obtener un carnet‘, cuenta la dirigente.
A la par de su tarea en el Centro de Abordaje, también continúa su tarea en la Asociación Civil Malvinas Argentinas, que funciona en la calle Roque Sáenz Peña 140 Sur, del Barrio Malvinas Argentinas.
Allí se dictan talleres de capacitación con salida laboral y hay talleres para chicos especiales, en los que se imparte clases de arte industrial y donde también tienen educación física.
Sobre el porqué ayudar a la gente, Graciela sostiene que ‘uno se mete en los problemas de la gente cuando padece un problema‘.
Y en su tarea actual dijo que se siente muy agradecida de su madre porque ‘ella fue quien me sacó adelante‘ porque con la poliomielitis estuvo cerca de ocho meses en un pulmotor y al borde de la muerte.
Según los resultados de las primarias, en las que Gioja obtuvo el 67,92 por ciento de los votos, seguido por el ibarrista Gustavo Rojas con el 26,3 por ciento, los datos la ubican con chances de llegar a formar parte del nuevo Concejo Deliberante rawsino a partir de diciembre.
En el caso de llegar a acceder a una banca en el cuerpo, Graciela dijo que todo su esfuerzo y dedicación va a ser para ayudar a las personas con discapacidades.
‘Desde el Concejo Deliberante hay que profundizar las políticas de ayudas a las personas con discapacidades y qué mejor que un persona que entiende de esos problemas‘, dijo la dirigente social.
En ese sentido dijo que la actual gestión de gobierno municipal ‘tiene un gran déficit que es la falta de ayuda a las personas que padecen discapacidades‘.
‘Agradezco a Dios estar viva y poder ayudar a toda la gente que lo necesita‘, dijo la mujer y prometió que en el caso de acceder a una banca en el Concejo Deliberante rawsino ‘voy a poner todo mi empeño en seguir colaborando con las personas que reclaman una ayuda‘.