Tras una semana de análisis de documentos e impugnaciones, el Ministerio de Salud Pública resolvió adjudicar el servicio de traslados sanitarios y emergencias médicas a la única empresa que quedó en pié en la licitación: SMI. La resolución representa un hecho relevante en la provincia, luego de que el servicio estuviera en manos de la misma firma durante 15 años. Con el cambio confirmado, la cartera sanitaria le pedirá a la flamante compañía que incorpore la mayor cantidad de personal que hoy esté realizando tareas, ya que se trata de profesionales especializados con experiencia en el rubro, aunque aclararon que la firma no está obligada a sumar a dicho personal. Por su parte, quién hoy tiene a cargo el servicio de ambulancias, Buenos Aires Call (ex Sifeme), fue a la justicia para frenar el proceso de adjudicación, al entender que Salud dio de baja su oferta de manera incorrecta.

La resolución de adjudicación se firmó el jueves a última hora, mientras que ayer fue girada la notificación a la empresa ganadora. Con ese paso cumplido, Salud Pública comenzará a dialogar con las autoridades, con el objetivo de que sumen al personal que hoy trabaja en Buenos Aires Call. El diálogo será contra reloj, ya que Medyc SRL (SMI) comenzará a trabajar a partir de 1 de enero. Según dijo ayer el secretario Administrativo Financiero de Salud Pública, Guillermo Benelbaz, "vamos a pedir que incorporen a la mayor cantidad de gente posible". Al momento que aclaró que "no es una es una obligación de la empresa a hacerlo, pero corresponde que el Estado cumpla el rol de intermediario, bregando por el derecho de los trabajadores".

Incluso, el secretario General de la Asociación de los Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA), Alfredo Duarte, confirmó las tratativas al indicar que "hemos hablado con Salud Pública para que la nueva empresa preserve las fuentes laborales y ministra nos ha indicado que va a trabajar en ese sentido".

Según indicaron fuentes calificadas, hoy trabajan unas 120 personas en el servicio de ambulancias, de las cuales alrededor de 40 son enfermeros y choferes, más una cifra similar de médicos. El resto es administrativo.

Ante la posibilidad de un cambio de empresas y que con el traspaso se pierdan puestos de trabajo, ATSA llegó hasta la Subsecretaría de Trabajo, a cargo de Jorge Oribe. El gremio le reclamó a Buenos Aires Call que garantice el pago de salarios y las eventuales indemnizaciones. La empresa desconoció el planteo al asegurar que su contrato no está finalizado, incluso confirmó que presentó un amparo en la Justicia contra la licitación. Así, desde la subsecretaría se dispuso una nueva reunión para el 3 de enero, fecha en la que se sabrá qué trabajadores se quedaron con su puesto y los avances de ex Sifeme en la justicia.

Hacía 15 años que Buenos Aires Call tenía en manos el servicio de ambulancias. La firma se había obtenido el servicio a través de renovaciones automáticas año tras año. La gestión de Alejandra Venerando abrió el juego con la licitación y a la compulsa se presentaron tres firmas. Lo llamativo fue que Buenos Aires Call ofreció cobrar un 21 por ciento menos de lo que factura hoy, pero su propuesta fue dada de baja por inconsistencias en la documentación. La oferta de SMI fue de 147 millones de pesos al año, lo mismo que hoy paga Salud, lo que representa un ahorro frente a la inflación.


Cambios del servicio desde el 1 de enero

La licitación del servicio de ambulancias se llevó adelante el 12 de este mes en la Escribanía Mayor de Gobierno. En la compulsa, Salud exigió que las empresas contemplen la reorganización de la provincia en cuatro bases: Centro (con Capital y alrededores), Norte (con Albardón), Sur (con Pocito) y Este (con Caucete).

Además, el pliego exigía que el 50 por ciento de las 12 ambulancias que debe presentar la empresa deben ser nuevas. Esa adquisición se debe cumplir en los primeros seis meses después de firmado el contrato.