La posibilidad de armar un amplio frente opositor capaz de dar pelea al oficialismo en octubre vuelve a complicarse porque dos de los principales socios, el senador Roberto Basualdo y el diputado nacional Mauricio Ibarra profundizaron señales de alejamiento, y el factor de recelo sigue siendo los alineamientos nacionales.
Basualdo, el dirigente que mejor mide en la oposición según una encuesta reciente, ya anunció que dará su respaldo al puntano Alberto Rodríguez Saá, e incluso lo recibirá hoy en su bunker de la calle Laprida pasando Rioja. Pero Ibarra, a pesar de que fue invitado, dijo que no irá, dando el primer gesto esta semana de perder las coincidencias plenas con el senador. Ayer, el rawsino se diferenció aún más de su socio diciendo que "hay afecto por (Eduardo) Duhalde". Y agregó: "Que Roberto se haya definido por Rodríguez Saá ha hecho que nuestras tropas hayan decidido recostarse en Duhalde".
De hecho, un dirigente encargado en la región de Unión Popular, el partido que utilizará el bonaerense para su proyecto nacional, como es el vicegobernador de Mendoza, Cristian Racconto, estuvo el miércoles reunido con el ibarrista e intendente de Rawson, Gustavo Rojas quien tiene intenciones de ser el referente provincial del duhaldismo, según dijo.
Las diferencias entre Basualdo e Ibarra no son nuevas. Un elemento de fricción surgió la semana pasada, cuando Basualdo anunció que no iba a ser candidato a gobernador e Ibarra aseguró que no había "necesidad de apurarse".
Por otro lado, la tercera pata del peronismo federal en la provincia, el PRO, se quedó sin presidenciable, tras la marcha atrás de Mauricio Macri. Hugo Ramírez, el referente macrista local, dijo que están a la espera de lo que ocurra a nivel nacional.
La empresa de armar un frente opositor con chances de darle batalla al giojismo (que viene fortalecido por el buen desempeño en la consulta popular del domingo, que le abrió la puerta al gobernador José Luis Gioja para ir por otro mandato de 4 años), se dificulta aún más porque en la oposición ya no existe el elemento aglutinador que fue el NO a la re-re. La consigna fue capaz de lograr algo inédito en la historia política provincial, como fue unir a toda la oposición. Pero eso ya pasó y con el calendario de las internas abiertas corriendo, que prevé para el 26 de mayo el fin del plazo para la presentación de las alianzas provinciales, llegan tiempos de definiciones.
De todos modos, la intención en el plano ideal que se respira en los partidos de la oposición es el de ir todos juntos, aunque reconocen que el hecho de que se hayan unificado las elecciones provinciales con las nacionales los complica sobremanera, porque los referentes nacionales no son los mismos.
Por ejemplo los radicales, el GEN y Actuar de Colombo, podrían confluir en la candidatura presidencial de Raúl Alfonsín, Basualdo se encolumnaría con el gobernador puntano e Ibarra lo haría con Duhalde, pero en el resto de las agrupaciones el alineamiento nacional es todavía una incógnita. DIARIO DE CUYO consultó a las diferentes fuerzas que actúan en la provincia y el panorama es incierto (ver aparte).
En 2007, los frentes fueron 6, contando el Frente para la Victoria, que postuló a José Luis Gioja; el frente UNA, que llevó a Miguel Arancibia como postulante a gobernador; la Coalición Cívica, que llevó a Diego Seguí; el Frente para el Cambio, que postuló a Basualdo; el PRO, que llevó a Hugo Ramírez, y la Concertación Popular, que llevó al dirigente gremial Horacio Córdoba.
