Ante la inminencia del juicio por el manejo discrecional de las ayudas sociales en Rivadavia, los exconcejales Carlos Reinoso, José Páez y Oscar Ruz primero habían manifestado que querían ir a un proceso abreviado en el que reconocerían su responsabilidad para evitar una dura pena. Luego, se arrepintieron y plantearon que preferían ir a un juicio tradicional para defenderse porque eran inocentes. Y ayer, increíblemente, volvieron a dar marcha atrás: firmaron y ratificaron el mecanismo abreviado en el que aceptaron un castigo de 2 años de prisión en suspenso y la inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos electivos.
De esa forma, las idas y vueltas de esos 3 exediles culminaron frente a una causa que tiene abundante prueba y que cuenta con un antecedente cercano: la condena contra sus excolegas Nicolás Tejada, Isidro Díaz y Lidia Díaz, quienes también se sometieron a un abreviado y recibieron la misma pena. La Sala III de la Cámara Penal dictará la sentencia contra Reinoso, Páez y Ruz el viernes 30.
La causa, que prescribe el 29 de junio de 2013, estuvo plagada de recursos que esgrimieron los abogados defensores de los acusados, los cuales fueron calificados por el Tribunal como “planteos improcedentes para dilatar el proceso” y “maniobras obstruccionistas”. Fuentes judiciales señalaron que a los letrados no les quedaron más cartas por jugar y aconsejaron a sus clientes a ir por un juicio abreviado para no recibir un castigo más severo. Quien sí irá al debate tradicional, que empezará hoy, es Juana Guerrero.

