Pidió un expediente en el Juzgado de Menores Nº 2, cuando se lo alcanzaron empezó a decir a los gritos que accionará legalmente contra la jueza y la secretaria del organismo, prácticamente le arrancó el documento de las manos a la empleada de la mesa de entradas y se fue. Eso es lo que fuentes judiciales le contaron a este diario sobre el revuelo que armó una abogada. Se llama Manuelita Moreno Ferrer y después del escándalo, fue denunciada penalmente por la magistrada María Julia Camus. La fiscal del caso pidió abrir una causa en su contra y un allanamiento para recuperar el expediente.

Los hechos se produjeron cerca del mediodía de ayer, en la planta baja del edificio que está en la esquina de calles Laprida y Aberastain. Allí funciona el juzgado que conduce Camus, que no dudó y actuó de inmediato. Las fuentes aseguraron que primero comunicó la situación a la Corte de Justicia y después radicó la denuncia en la Fiscalía Correccional Nº 4, comandada por Silvina Gerarduzzi.

Según testigos de la situación, Moreno Ferrer llegó y solicitó un expediente que aparentemente la tiene como representante legal de una de las partes intervinientes. La mujer de mesa de entradas que la atendió lo buscó y apenas se lo entregó, aseguraron, comenzó a quejarse en dirección a la jueza y a la secretaria del Juzgado, Gladys Capdevila, para después amenazar que las denunciará. Sin hacer el trámite correspondiente se llevó el expediente y cuando le advirtieron que no lo podía hacer, relataron, contestó que la fueran “a buscar con la Policía”.

Camus estaba en su despacho del primer piso y apenas se enteró, motorizó la denuncia que ahora tiene como implicada a Moreno Ferrer. Gerarduzzi solicitó instruir un proceso ante el juez Correccional de turno, Matías Parrón, y según las fuentes, la abogada podría ser imputada por el delito de hurto, es decir llevarse algo ajeno sin el uso de la violencia.

Gerraduzzi pidió una serie de medidas que Parrón tendrá que decidir si concede o no. Entre ellas, la declaración testimonial de la empleada y una estudiante de Derecho que está haciendo prácticas en el Juzgado de Menores Nº 2 y un allanamiento para secuestrar el expediente. Si asiente, el juez dispondrá si el operativo se hace en el domicilio particular de Moreno Ferrer o en su estudio jurídico.

El delito en juego es excarcelable, por lo que la abogada no tendría que ir efectivamente a prisión si el día de mañana es condenada. Sin embargo, le quedaría una mancha en su planilla prontuarial y para colmo, por un hecho cometido en el ejercicio de su profesión (Ver aparte). Este diario intentó comunicarse con ella para que diera su versión de lo que pasó, pero fue imposible porque el teléfono celular que figura a su nombre en la página web del Foro de Abogados dio apagado y en el fijo no atendió nadie.