Si bien la relación entre la Unión Cívica Radical (UCR) y el PRO atraviesa por una buena senda, eso no quita que hayan aparecido disconformidades. En el partido centenario sienten que no se han cubierto las expectativas en cuanto a las designaciones de su gente en los cargos nacionales con sede en la provincia, ya que el tema está, por ahora, bajo el absoluto dominio del macrismo local. Por eso, internamente quedaron en salir a buscar más participación en la mesa chica que tiene que ver con esa toma de decisiones. Por lo pronto, referentes de ambos sectores acordaron reunirse para ir limando asperezas.
Con la llegada de Mauricio Macri a la Casa Rosada se disparó un proceso lógico de recambio de autoridades en todas las dependencias nacionales, incluidas las que se encuentran en San Juan. El líder del PRO local y diputado nacional, Eduardo Cáceres, ha sido el director de orquesta a la hora de cubrir los puestos en la provincia y ubicar a algún otro en la Nación. Ha logrado que hombres y mujeres de su espacio consigan lugares en los organismos e inclusive ha abierto el juego a sectores aliados y opositores. Muestra de ellos son los nombramientos de integrantes del frente que lidera el basualdismo, como el actuarista Rodolfo Colombo en la Anses y Julio Pascual, íntimo amigo de Roberto Basualdo, en el PAMI; además del peronista Marcelo Alós como vice del INV.
Frente a ese escenario, en la UCR observan que los casilleros no se completan con hombres del partido y que tampoco tienen mucho margen en las definiciones, cuando a nivel nacional se había hablado que todo se iba a analizar entre los socios. Los radicales reconocen que hay diálogo con el PRO, que ven con buenos ojos que las charlas se hayan extendido al basualdismo y no hablan de romper la alianza. De todas formas, la sensación de inconformidad es palpable por la falta de lugares.
Para retomar la iniciativa, el Comité radical impulsó que el electo diputado provincial Eduardo Castro quede como vice primero a cargo de la presidencia por la licencia de Hugo Domínguez y forme parte de la mesa de diálogo con el PRO. Castro, junto a sus correligionarios Gustavo Costamagna, excandidato a vicegobernador, y María Luisa Velasco, del sector opositor, tendrá la tarea de sentarse junto a Cáceres y Enzo Cornejo, secretario General del PRO, para afianzar el espacio. En términos políticos es contar con una cuota mayor de decisión y tener más espacios. Esa mesa de diálogo se reuniría mañana, en un intento por acercar posiciones.