Tras la cumbre presidencial del otro lado de la cordillera, el proyecto del túnel internacional por el paso de Agua Negra finalmente tiene el camino allanado. Como lo había adelantado DIARIO DE CUYO, los presidentes de Chile, Sebastián Piñera, y de Argentina, Cristina Fernández, firmaron una declaración en la que autorizan a licitar la obra en un tiempo ‘breve‘. El plazo rondará los 6 meses, según precisó el ministro de Planificación Federal de la Nación, Julio De Vido, que junto al gobernador José Luis Gioja fue uno de los funcionarios que integró la comitiva que cruzó los Andes.

Luego de arduas negociaciones y del empeño puesto de manifiesto por Gioja, reconocido ayer en una conferencia de prensa con la participación de los ministros de Obras Públicas de Chile, Laurence Golborne, y De Vido, la obra está más cerca de concretarse. Con el acuerdo de los jefes de Estado, el proceso para llamar a licitación entró ahora en una fase clave.

En una declaración conjunta, que incluye otros temas como la voluntad de diálogo político e integración física, ambos países habilitaron al Ente Binacional Túnel de Agua Negra (Ebitan) a licitar obra. Eso es posible porque implica la ratificación del Tratado de Maipú, que habían firmado la propia Cristina y la antecesora de Piñera, Michelle Bachelet. Allí había quedado convenido que el organismo se debía encargar de todo el proceso para construir el túnel, luego de ser instruido por los presidentes, como finalmente ocurrió.

Cristina llegó a Chile con una nutrida agenda, que incluía cuestiones de coyuntura política, como la pelea diplomática que encaró la gestión kirchnerista por la soberanía de Malvinas (ver página 22). Pero el interés adicional de los sanjuaninos estuvo puesto en el túnel.

El documento firmado por Cristina y Piñera tiene una extensión de 13 páginas y hace referencia a varios pasos fronterizos, pero el que tuvo el avance más importante fue Agua Negra por el tenor de la definición que le tocó. En el punto número 7, dice que “Los presidentes expresaron su satisfacción por los notables avances efectuados por los organismos encargados del Proyecto Túnel Internacional Paso de Agua Negra” y agrega “….así como concretar los actos que fueran necesarios para la realización del llamado a licitación pública internacional para la ejecución de la citada obra en el más breve plazo posible”.

Fue el propio ministro Golborne quien reconoció que el túnel de Agua Negra ‘es el que tiene el mayor grado de avance‘. El funcionario sostuvo que ‘el proyecto va a ser financiado por la República Argentina‘ y que el 28 por ciento que le corresponde a Chile, por el 72 restante es de nuestro país, va ser reintegrado después”. En ese sentido, la posibilidad que se acordó hasta ahora es que Chile le cederá a la Argentina lo que le correspondería por el cobro de peajes por un tiempo determinado, hasta cubrir el monto.

El ministro De Vido fue cauto al sostener que ambos proyectos, el túnel sanjuanino y el del tren trasandino, estaban en ‘igualdad de condiciones‘ y precisó que en el financiamiento habrá aporte estatal y del sector privado. Mencionó las alternativas del BID y del banco estatal de Brasil.

Cuando le tocó hablar, Gioja dijo que ‘esta es la obra más estratégica de la región y que tiene que ver con un refundar San Juan‘. El intendente de la IV Región, Sergio Gahona, destacó que la obra del túnel es ‘la que se encuentra más adelantada‘ y relacionó este proyecto con el reciente llamado a licitación para la ampliación del puerto chileno de Coquimbo,

Entre otros entendimientos alcanzados, aparece un convenio para trasplantados, el reconocimiento entre ambos países a los títulos universitarios, el trabajo conjunto de la Policía Federal Argentina y la Policía de Investigaciones de Chile y la creación de un ente binacional que van a integrar los gobernadores argentinos y los intendentes chilenos.