El arribo del perito de la asamblea antiminera “Jáchal No se toca” en la mina Veladero desencadenó un cruce de versiones con la empresa Barrick, operadora del proyecto. El hidrogeólogo estadounidense Robert Morán aseguró ayer que la empresa no le brindó toda la documentación que requirió. Desde la compañía, Rick Baker, gerente General del emprendimiento iglesiano, salió a desmentirlo al afirmar que sí le presentaron la información y que quedó asentado en un acta. Los informes fueron guardados, lacrados y llevados por la Policía Federal al juez federal que está llevando adelante esta causa, Sebastián Casanello. De todas formas, el directivo resaltó que entiende que cualquiera puede tener acceso a ellos, pidiéndoselos al magistrado.
Morán, con una orden de allanamiento, llegó a Veladero la semana pasada como parte de la comisión de expertos que analizará las condiciones de la mina tras el derrame de poco más de un millón de litros de solución cianurada en septiembre. La medida fue dictada por Casanello, quien está interviniendo tras una denuncia de la Asociación de Abogados Ambientalistas de la Patagonia. La participación del magistrado de Capital Federal está en revisión de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, por un conflicto de competencia con el juez de Jáchal, Pablo Oritja.
Como el tema aún no está definido, Casanello continúa tomando decisiones y el perito propuesto por la asamblea jachallera recorrió Veladero el jueves y viernes pasado. Morán brindó ayer una conferencia de prensa y aclaró que no podía dar a conocer los resultados de los 12 puntos que fueron ordenados por Casanello. Entre ellos, el magistrado pidió que se informe si hay fallas en el proceso de lixiviación, si la empresa tomó medidas de corrección tras el derrame y si la compuerta por donde se fugó la solución cianurada es segura. El experto sí señaló que durante su recorrido “no hemos visto prácticamente nada de información” y que la compañía sólo les dejó ver “algunas páginas”. No obstante, señaló que está en condiciones de elevar el informe.
Desde Barrick el que contestó fue Baker, el gerente que asumió en noviembre en Veladero, tras el incidente, y que recorrió las instalaciones junto a Morán. “Sí se presentó información, está documentado”, remarcó el directivo, quien explicó que “desafortunadamente, por el proceso judicial en el que estamos, no se permitió que se entregara”. Sucede que la Policía Federal tomó los informes y se los llevó para entregárselo a Casanello, indicaron desde la empresa. Además, agregaron que el perito no solicitó copias de los documentos.
En la conferencia, Morán aseguró que el valle de lixiviación de Veladero se encuentra en un ambiente periglaciar, lo que no está permitido por la ley nacional de glaciares. Frente a ese punto, Baker manifestó que “es uno de los temas del que no podemos hablar ahora porque está judicializado”. Si el derrame llegó a Jáchal, Morán señaló que no lo sabía porque “no he visto suficiente información y la compañía no lo ha hecho público”. Sin embargo, en base a las pericias de la propia Barrick, el juez Oritja, que también investiga el caso, llegó a la conclusión que el incidente impactó en 3 ríos iglesianos y no afectó al de Jáchal. La contaminación no afectó a personas ni animales, según los informes.