Después de un año de gestión ante las nuevas autoridades nacionales, la administración de Alberto Fernández canceló la deuda que la gestión macrista contrajo con la provincia por la atención de los presos federales en el penal de Chimbas. Desde la Secretaría de Seguridad y Orden Público, que encabeza Carlos Munisaga, confirmaron que a las cuentas del Servicio Penitenciario llegaron 69.300.000 pesos correspondientes a los montos adeudados de 2017, 2018 y 2019, mientras lo que corresponde al año pasado "se liquidará en los próximos meses".

El reclamo ante Nación por los presos federales fue iniciado por el exministro de Gobierno, Emilio Baistrocchi, quien incluso llegó a dar de baja el acuerdo con la administración central por la abultada deuda que se había acumulado.

Gracias al cambio de gobierno a partir del 2019 y la buena relación entre Uñac y el presidente Alberto Fernández, el rojo en las cuentas se pudo saldar.

Así lo explicó Munisaga, al recordar que, ni bien asumió como titular de la cartera, "el gobernador Uñac nos encomendó gestionar el pago de esta deuda. Luego, la pandemia afectó ese proceso pero destaco que el dialogo permanente con las autoridades nacionales de la Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios, ha permitido que se concretara el pago". Los fondos que llegaron serán destinados a la construcción, remodelación, ampliación y mantenimiento de las instalaciones del Servicio Penitenciario Provincial. También será utilizado para la compra de equipamiento, compra de movilidades, armas y elementos operativos, de acuerdo a lo que establece el convenio firmado con las autoridades nacionales.