Los inspectores de Obras Sanitarias Sociedad del Estado (OSSE) establecieron un récord en la cantidad de multas que aplicaron por el derroche agua durante el primer trimestre de este año. En ese lapso, llegaron a 3.444 actas de infracción, un 49,7% más que en igual periodo de 2012 y un 175,5% por encima de 2011. Cristian Andino, presidente de la empresa estatal, señaló que el aumento se produjo porque se han incrementado los controles y las zonas del Gran San Juan que se recorren, dado que han reestructurado las cuadrillas y han sumado personal contratado a dichas tareas.
Pero no sólo ha crecido el porcentaje de multas sino también el cobro de las mismas. De las 2.307 actas que se labraron en los 3 primeros meses del año pasado, el nivel de cumplimiento fue de casi el 32%. En el mismo período de 2013, de 3.444 actas, el porcentaje fue del 45%, según los datos de la repartición. La suba se debió a que los inspectores ahora salen con cámaras fotográficas y registran las infracciones de las personas que riegan jardines o veredas o lavan vehículos en el horario de 9 a 21, en el que está prohibido el uso de agua que no sea para consumo humano. Frente esa evidencia, la gente termina accediendo al pago voluntario, expresó Andino.
El funcionario además adelantó que a partir del 1 de diciembre, por primera vez van a empezar a controlar que no se malgaste el agua en los departamentos alejados (ver aparte). Además resaltó que para esa fecha también van a salir a las calles una nueva tanda de 10 inspectores contratados con cámaras de fotos.
Las medidas obedecen a una decisión de la gestión giojista de endurecer su posición frente a los contribuyentes que malgastan agua potable. El objetivo es concientizar a la población sobre la utilización racional de un recurso vital frente a la crisis hídrica que viene atravesando la provincia, explicó Andino, aunque también hay una clara decisión de avanzar con la aplicación de castigos a todos aquellos que no atiendan las recomendaciones y sigan sin cuidar el agua.
Según las estadísticas que tienen en OSSE, en el primer trimestre de 2011 se hicieron 1.250 multas. En los 3 meses iniciales del año pasado, las actas de infracciones llegaron a las 2.307. En 2012, el titular de la empresa estatal señaló que a las 4 cuadrillas que tenían le sumaron otras 2 más para hacer hincapié en el control. Y para 2013, contrataron a 10 personas para que salieran en moto y con cámaras fotográficas a verificar el uso del agua durante diciembre, enero, febrero y marzo, los meses de mayor consumo por las altas temperaturas. Así, las multas treparon a 3.444. El funcionario destacó que con mayor personal han podido cubrir más zonas y por eso han crecido los controles. En diciembre de este año, la repartición volverá a contratar a 10 sabuesos que llevarán adelante las tareas de inspección y registro fotográfico.
Según el Código de Faltas, un juez puede sancionar con hasta 4 mil pesos a un infractor. Sin embargo, el monto depende del criterio del magistrado, si la persona es reincidente o si realizó un consumo desmedido, por ejemplo. Andino expresó que la multa por regar una vereda o un jardín fuera del horario permitido ronda los 300 pesos. Ahora, como los inspectores sacan fotos a la gente que ha cometido una falta, el pago voluntario se ha incrementado, ya que si el usuario persiste en no abonarla y en desconocer las intimaciones judiciales, el monto aumenta considerablemente y hasta puede duplicarse, resaltó el funcionario.

