El gobierno nacional protagonizó ayer un nuevo cruce con el jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri en medio del escenario electoral, en esta oportunidad las diferencias se produjeron por acusaciones cruzadas por la demora de las obras en la Autopista Illia.

Macri renovó sus peticiones al gobierno de Cristina Fernández para que libere zonas que impiden la ampliación de la autovía y advirtió que "lamentablemente, estos son los casos en que la política perjudica a la Argentina".

Más tarde, el secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, replicó las críticas, y acusó a Macri de mantener una "actitud demagógica" y enfatizó que hubo diálogo y reuniones con el jefe de gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Sin embargo, en declaraciones a DyN Rodríguez Larreta afirmó que "Schiavi miente porque jamás hablé con él de este tema".

"Lamentablemente, estos son los casos en que la política perjudica a la Argentina. Por eso quiero decirle a la señora presidenta Cristina Fernández que entre la política y la gente nosotros elegimos la gente", subrayó Macri. El mandatario porteño se quejó porque desde mediados del año pasado no obtiene respuesta a sus reclamos para que aplique las obras necesarias para avanzar con la extensión de la autovía.

Sin embargo, desde el gobierno nacional fue Schiavi quien salió a rechazar los cuestionamientos del jefe de Gobierno porteño y, también en conferencia de prensa, lo acusó de instalar un "show mediático". "No es verdad que no hay diálogo. El día que hablamos del costo de la obra que era de unos 200 millones de pesos se levantaron y se fueron y no los vimos más", finalizó Schiavi.