San Juan, 14 de abril.- El concejal del bloquismo, Miguel Atampiz desató un vendaval de críticas hacia la gestión y la persona del intendente de Zonda, Francisco Porra. Antes, en marzo, hubo cruces en el municipio de la Ciudad de San Juan, cuando los concejales del bloquismo no acompañaron una ordenanza promovida desde el ejecutivo en un tema clave como el conflicto con el SUOEM.

El titular del ejecutivo zondino, en conversación con DIARIO DE CUYO online contestó los ataques. “Creo que se está adelantando a las elecciones de 2011. Estos pedidos no tiene mayor fundamento”, declaró Porra. “El concejal Atampiz tiene todo el derecho de elevar pedidos de informe, pero una cosa es hacer uso de su prerrogativa, y otra cosa es hacer abuso de ella. Está haciendo trabajar mal al cuerpo colegiado”, señaló.

Punto a punto, las acusaciones de Atampiz fueron contestadas por Porra que de todas formas deberá presentar las explicaciones oficiales el viernes, cuando el Concejo Deliberante retome la sesión pasada, que quedó inconclusa ante el pedido de cuarto intermedio para elaborar los informes.

Según lo expuesto por el concejal del bloquismo, Porra, o su administración, declaró un número de entradas vendidas en la fiesta del Cerro Blanco inferior al real. “Todo el mundo sabe que asistieron más de 20 personas a la fiesta, y la municipalidad nos dice que se vendieron 7000 entradas o algo más”. Sobre este punto Porra aseguró no tener ni la información precisa (que prometió para la sesión del viernes) ni tampoco la seguridad de que el público haya sumado la cantidad que dice Atampiz.

Una de las acusaciones más duras del edil, ya que observa un sesgo personal, es con la que involucra a la esposa de Porras en una irregularidad de orden administrativa. “La señora de Porra tiene una asociación civil que instaló un rancho donde se vendió mercadería durante la fiesta, y no se le cobró el canon correspondiente”.

El intendente zondino exhibió ante este cronista la Ordenanza Nº 12/2010, que en su artículo 7º autoriza a la administración municipal a exceptuar del pago del canon a “artesanos del Departamento de Zonda, a los Centros de Jubilados, Instituciones Religiosas y Asociaciones Civiles sin fines de lucro con domicilio en el departamento”. El concejo sancionó esta ordenanza con vistas exclusivas a la Fiesta del Cerro Blanco, “en una sesión en la que Atampiz estuvo, y con su voto”, manifestó Porras.

Otro punto conflictivo que el concejal reveló en su pedido tiene que ver con el alquiler de una retroexcavadora, por parte de un particular, que según declaraciones del edil, “sumó dos horas de facturación, que son 300 pesos, cuando todo Zonda sabe que dos horas se tarda en ir y volver del lugar donde trabajó. Además se rompió un repuesto que cuesta 20.000 pesos del que se tendrá que hacer cargo el municipio”.

Porras desmintió la versión de Atampiz. “La máquina fue y vino en un camión. Se facturó lo que realmente trabajó. Yo tengo autoridad emanada del concejo por una tributaria para alquilar máquinas o prestar servicios a los vecinos y se le cobra igual a todos”. Con respecto al desperfecto mecánico, afirmó que “la máquina fue y vino sana. Se rompió luego y no una pieza de ese valor que declara Atampiz, sino otra y con un costo muy inferior”.

Por último, Porra desmintió terminantemente los dichos de Atampiz en los que lo acusa de exigir al cuerpo colegiado que tome medidas disciplinarias como represalia. “Pidió que me suspendan”, dijo el edil. “Eso no es cierto”, contestó Porra. “No hice eso ni lo haría jamás, porque no puedo castigar a nadie por cumplir con una facultad que la ley le otorga”, aunque insistió en lo había expresado, acerca del uso y abuso de las funciones.
Estos pedidos y más deberá responder el intendente en la sesión del viernes, como otro capítulo de un cruce que no parece tener un final cercano.