A pesar de los cambios políticos ocurridos en los últimos días en la IV Región de Chile, con la renuncia de algunos funcionarios para ser candidatos en las legislativas del país trasandino el año que viene, ayer quedó de manifiesto que las buenas relaciones entre los funcionarios de ambos países siguen intactas. En el acto formal de apertura al tránsito vehicular de la ruta internacional al vecino país por el paso de Agua Negra en el que por primera vez se reunieron oficialmente el gobernador José Luis Gioja y el nuevo intendente de la IV Región, Mario Burlé, sucesor de Sergio Gahona, ambos ratificaron los lazos de hermandad y el propósito de continuar trabajando por la pronta licitación del túnel, prevista para diciembre.
Como todos los años para esta época, pero en esta ocasión un día después de lo que ocurrió el verano pasado, autoridades de San Juan y de la IV Región asistieron a la ceremonia para dar apertura al tránsito de la ruta internacional, pero esta vez sirvió para que el gobernador Gioja se encontrara cara a cara con su par de la IV Región, que es Burlé. Pero, según él mismo se encargó de explicar, conoce a fondo el proyecto del túnel porque fue funcionario del gabinete de su antecesor, Gahona, quien también estuvo presente en el acto para acompañar a Burlé y ratificar el interés chileno en la pronta licitación de la obra del túnel por la Ruta 150. Aunque ningún funcionario se animó a dar una fecha precisa, se espera que sea en diciembre.
“El proyecto no va a sufrir ningún retraso”, dijo Burlé, y citó como muestra de cercanía con San Juan que su abuela era Argentina.
El tema del pronto llamado a licitación para la obra del túnel estuvo presente en todo momento en el acto, pero los funcionarios fueron cautos sobre las fechas.
Asistieron, además, los intendentes de Iglesia, Mauro Marinero, y de Capital, Marcelo Lima, el ministro de Gobierno, Adrián Cuevas, y el nuevo gobernador de la Provincia de Elqui, Juan Francisco García.
Pasadas las 11 y a 4.765 metros de altura, comenzó la ceremonia en medio de un fuerte viento que congelaba las manos. Incluso la puna se hizo sentir al punto que el intendente Burlé tuvo que retirarse unos momentos a su movilidad, producto de una descompensación momentánea, pero después se repuso.
Durante el acto, el que no dejó de hacer flamear las banderas de ambos países fue el popular “Coco” Mallea, un antiguo trabajador de Vialidad y que está siempre presente para la apertura del paso.
La comitiva se trasladó después hasta Guardia Vieja, donde habían montado una gran carpa para agasajar a los participantes del acto y donde hubo intercambio de obsequios.

