La Iglesia reclamó ayer soluciones "integrales" y no sólo parciales al problema de la pobreza, y anunció que presentará en breve una propuesta sobre un derecho universal para todos los niños pobres, a la que denominó Ingreso Básico para la Igualdad y la Equidad en la Niñez, por sus siglas, BIEN.

"La pobreza es un tema integral. No solamente requiere soluciones parciales, transitorias y de corto plazo sino que debemos pensar también en respuestas integrales y de largo plazo", advirtió el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, obispo Jorge Casaretto, al cerrar la tradicional Semana Social de Mar del Plata.

El prelado exhortó a "mantener viva la temática de la pobreza en la agenda argentina" y consideró que para que "haya un proyecto de país, es necesario un gran acuerdo, una gran actitud reconciliadora y de encuentro" entre todos los argentinos.

En tanto, el presidente de la Comisión Nacional de Justicia y Paz, Eduardo Serantes, anunció que junto con Cáritas Argentina están trabajando en una propuesta sobre un derecho universal para los niños argentinos.

"Esta propuesta aspira a convertirse en una política de Estado independientemente del gobierno de turno. A esta propuesta la hemos llamado Ingreso Básico para la Igualdad y la Equidad en la Niñez", precisó.

Tras reconocer que "un derecho universal no soluciona totalmente el problema de la pobreza", Serantes reclamó que "este derecho deberá sea complementado con otras políticas públicas y sostenido por el apoyo de la sociedad".

Por su parte, el embajador argentino ante la Santa Sede, Juan Pablo Cafiero, reflexionó sobre el desafío del bicentenario patrio, al hablar sobre "Fe y política: aportes desde el humanismo cristiano".