"Fue un descuido de la custodia femenina. Se le va a aplicar la sanción que corresponda". Así admitió anoche un alto jefe policial a DIARIO DE CUYO, cuando explicó cómo fue que trascendió la foto de la directora Política de Greenpeace, Eugenia Testa, detenida en el calabozo de la comisaría de Rodeo, un lugar donde sólo ingresa la policía y está prohibido el paso al público.

En la policía destacaron el despliegue tecnológico con el que se movilizaron los activistas, quienes contaban con transmisión satelital, equipos de autonomía de energía, cámaras web en los cascos y en el interior del contenedor costosos equipos de fotografías y filmación.

La imagen de la activista en el interior del calabozo fue difundida por Greenpeace a las agencias de noticias y medios de comunicación, en forma inmediata al momento en que ocurrían los hechos. Incluso fue la tapa de ayer de un diario porteño.

La foto se difundió en horas del mediodía del miércoles, cuando Testa era la primera detenida por el piquete que Greenpeace montó en el ingreso a la mina Veladero y el proyecto Pascua-Lama, con la intención de reclamar que se aplique la Ley de Glaciares.

En la policía creen que la imagen fue capturada en forma ilegal en un descuido de la custodia femenina, cuando otros activistas de la ONG fueron a la comisaría 22 de Rodeo con la excusa de visitar y suministrarle alimentos a la detenida.

En horario de visita, el proceso normal en cualquier comisaría es que la custodia saque al detenido hasta una sala, porque el calabozo es un lugar restringido al público para preservar la seguridad de la persona privada de su libertad.

Incluso, en la policía informan que Testa estuvo algunas horas en el calabozo, ya que por la tarde siguió detenida en la parte administrativa de la comisaría, junto a otra joven activista de apellido Del Cabo. Ambas están acusadas de violar el artículo 194 del Código Penal, después de que la policía le informara que debían habilitar el camino a la mina y se negaron.

Estas dos mujeres, junto a dos sanjuaninos, estuvieron algunas horas demorados, ya que en la noche del miércoles ya habían recuperado la libertad. Y ayer en la mañana ya habían abandonado la localidad de Rodeo.

Lo único que quedó en la comisaría 22 es el contenedor que habían atravesado en el camino para impedir el paso de los vehículos a Veladero.