Dirigentes opositores del macrismo, el radicalismo y el peronismo disidente, con el respaldo del vicepresidente, Julio Cobos, reclamaron ayer que el proyecto oficial de radiodifusión sea tratado por el próximo congreso y anticiparon que revisarán "todas las leyes que sean sancionadas entre el 28 de junio y el 10 de diciembre próximo".

El acuerdo fue anunciado después de protagonizar un encuentro que se realizó en el despacho del presidente del Senado y reunió al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, a quien acompañaron Gabriela Michetti, Federico Pinedo y Horacio Rodríguez Larreta; el diputado de Unión-Pro Francisco de Narváez, los jefes parlamentarios de la UCR Ernesto Sanz y Oscar Aguad y los legisladores del cobismo, Daniel Katz y Laura Montero.

Los ex gobernadores y dirigentes del justicialismo disidente Carlos Reutemann y Felipe Solá adhirieron a las conclusiones del encuentro, pero se excusaron de participar en razón de tener compromisos anteriores.

En una carta leída durante la reunión, Reutemann expresó que "esta ley debe tener legalidad pero también legitimidad, es decir que es imprescindible que pueda ser tratada en este período, pero votada con la legitimidad que le otorgarían los representantes elegidos el 28 de junio".

El encuentro, que duró alrededor de media hora, estuvo originado en pedidos de "una audiencia urgente" realizados a Cobos por Macri y De Narváez, quienes en una carta pidieron "considerar cursos de acción que permitan defender los intereses y los derechos constitucionales de la provincia y la Ciudad de Buenos Aires" afectados por el proyecto oficial.

En conferencia de prensa posterior a la reunión, Macri expresó que la iniciativa contempla "la imposición de la jurisdicción federal sobre medios de prensa, que está expresamente vedado por el articulo 32 de la Constitución Nacional y vulnera las atribuciones de las jurisdicciones locales".

Aunque Michetti intentó minimizar la ausencia de la jefa de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, argumentando razones de salud, desde el partido se dejó en claro que no fue porque la reunión del vicepresidente Cobos con opositores significaba "un riesgo institucional".

La reunión realizada ayer en el Congreso es el primer gesto conjunto de un amplio sector de la oposición por unificar sus acciones para enfrentar el proyecto oficial.

Una convocatoria similar a la de hoy la realizó Cobos en julio del año pasado, cuando llamó a gobernadores de las provincias productoras de soja para debatir el proyecto oficial de la resolución 125, a la que concurrieron los mandatarios enfrentados con el gobierno nacional, pero se negaron a asistir los más próximos a la Casa Rosada.