En una nota anterior nos referimos estrictamente a los aspectos legales de la presencia en San Juan de una comisión híbrida designada por el juez sin jurisdicción Sebastián Casanello con la finalidad encubierta de intentar cerrar la mina en el Valle del Cura. Un juez de la Ciudad de Buenos Aires que en los últimos días recordó que tenía en sus manos causas graves de corrupción y lavado de dinero no tramitadas, incurre en invasión de jurisdicción y falta de competencia por ser un juez penal en una cuestión de ambiente. Vale la aclaración de que el juez de Jáchal Pablo Oritja, autor de una sentencia firme en el asunto del derrame de solución cianurada, es competente por tener a su cargo ambos fueros, civil y penal, por ser la suya una jurisdicción pequeña. La parte civil es la específica de medio ambiente.
Recordemos también que Casanello tomó el tema como resultado de la práctica de lo que se llama ‘forum shopping‘, es decir, la búsqueda por parte de litigantes de una oficina que se calcula previamente les sería aliada. Esta práctica se vio mucho en aquellos numerosos juicios por dineros retenidos en el corralito y está en vías de ser regulada definitivamente por la Corte Suprema de Justicia de la Nación que ha creado un registro al que deberán adherir las cortes provinciales justamente para que no tramiten mismos temas en distintos juzgados a riesgo de que pudiera haber sobre un mismo caso sentencias contradictorias.
Pero esta vez evaluaremos el volumen del daño a provocarse en caso de que se cumpliera la intención de los querellantes de clausurar el yacimiento dejando a la calle a 3 mil empleados directos a muchos más indirectos, grandes recursos en el interior de los cerros y centenares de empresas en la quiebra. Veamos. La mina produce un promedio de unas 620 mil onzas por año. El precio actual de cada onza es de U$S 1.240 aproximadamente, lo cual haría una venta total por valor de unos U$S 770 millones de los que la provincia, luego de la reforma que se practicara a la ley de regalías, debe recibir directamente el 3%. Total: U$S 23 millones cien mil dólares que al tipo de cambio actual cercano a los $15, son $346,5 millones. Noten que la cifra se acerca curiosamente a 365 de manera que casi podría decirse que se perdería de recaudar $1 millón por día solo por este rubro. Para poner todo más cerca de nuestro entendimiento y siempre considerando los costos actuales, son 3 casas del IPV por día.
Pero esta no es la parte más importante. A la fecha y según el último reporte trimestral oficial dado a conocer a los accionistas en febrero, el costo operativo por onza es de U$S912,94 es decir, eso es lo que se gasta localmente por unidad entre lo que es propiamente la explotación de la mina, el procesamiento del mineral y la producción del doré, las tareas de mantenimiento y todo el conjunto de actividades de administración. Por ejemplo, lo que es propiamente mina incluye el consumo de gas oil y aceites, alquileres de maquinaria y equipos del tipo de los que se utilizan en la obra vial, contratistas para mantenimiento mecánico, compra de explosivos, de repuestos, y una elevada utilización de camiones en el transporte de los insumos hacia el yacimiento. El procesamiento del mineral comprende la trituración con un elevado consumo de materiales, repuestos y combustible para la generación de energía eléctrica y la necesidad de adicionar cal y también cañerías, válvulas y repuestos. Hay además gastos generales en prevención de riesgos, en respuesta a la emergencia, en el mantenimiento del camino de acceso, manejo de residuos y monitoreo ambiental. Finalmente las tareas de administración del campamento, el transporte del personal y la administración general de la operación desde las oficinas de San Juan.
Si multiplicamos la cifra del costo unitario de producción, U$S 912,94 por la producción anual de 620 mil onzas, nos da la cifra de U$S 566 millones y monedas que es lo que efectivamente la mina gasta, fuera de impuestos, por año. Volvamos a aplicar la tasa de cambio de $15 por dólar y llegaremos al asombroso destino de $8.490 millones y monedas que es la cifra final de riqueza que ese yacimiento deja en su operación local. Ahora bien, el presupuesto aprobado para el ejercicio de este año en el Estado provincial es de $24.594 millones por lo que la operación de Veladero representa el 34,52% de ese total, es decir, más de la tercera parte del gasto en el funcionamiento e inversiones del Estado. Pero vamos a algo más asombroso. El total de los recursos de que se valen los 19 municipios según también el presupuesto 2016 son $1.840 millones. Si relacionamos de vuelta la cifra que deja la mina con el gasto anual de los 19 distritos el resultado golpea: Cerrar la mina equivaldría a cerrar los 19 municipios durante cuatro años y medio. Si vamos a la seguridad que tiene un gasto previsto de $1.533 millones sería como cerrar todas las comisarías durante 5 años. Si nos concentramos en vivienda, con 1.470 millones de presupuesto anual, habría que dejar de construir durante casi seis años o, finalmente, cerrar por una temporada completa todas las escuelas (7.402 millones) y dos años los hospitales (3.575 millones). Mucho para satisfacer el ego y la vanidad de algunos.