San Juan busca convertirse en la primera provincia del país en generar energía eléctrica a través de una turbina que trabaje a base de residuos domiciliarios orgánicos. El proyecto demanda 30 millones de pesos y la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la provincia ya lo presentó a nivel nacional, para intentar conseguir el 50 por ciento del financiamiento. Aunque aún no está definido oficialmente, para la instalación hay en vista tres departamentos.

El ambicioso plan fue dado a conocer ayer por el flamante secretario de Ciencia y Tecnología de la gestión giojista, Tulio Del Bono, en el programa “Insolentes”, de Radio Sarmiento. Según el funcionario, “ya hay una experiencia de este tipo en la comunidad europea, pero sería la primera turbina a escala industrial de ciclo combinado que funcionaría en el país”.

El nuevo sistema de generación de electricidad es a base de residuos domiciliarios orgánicos, como restos de comida. La masa de basura se procesa y el contenido calórico alimenta una caldera que genera vapor y éste, a su vez, hace funcionar una turbina. El circuito incluye un ciclo combinado que da mayor rendimiento, ya que en forma sincronizada trabaja otra turbina que toma el humo y el calor que se pierde de la primera y ayuda a la generación de más energía.

El proyecto fue postulado el viernes en un concurso que ha lanzado el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación, para financiar esquemas de innovación tecnológica. El límite de ayuda para las iniciativas que resulten ganadoras es de 15 millones de pesos y se entrega en forma de subsidio, por lo que la provincia no debería devolver el dinero que le entreguen. Para conseguir el resto de los recursos que demanda la iniciativa, la idea es meter mano a recursos del Estado provincial y del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) (Ver Financiamiento).

El mecanismo ya fue probado por el INTI y, al menos en laboratorio, es viable. Ahora, el desafío oficial es desarrollarlo a escala industrial para ver si es conveniente en función de los costos de generación, la potencia de energía que permitiría producir y cuántas casas de familia se podrían abastecer.

Por lo pronto, la pruebas que se han hecho previamente han servido para fijar un punto de partida. Según Del Bono, “para que sea económicamente rentable, la turbina debe abastecer de energía a comunidades de, por lo menos, 20 mil habitantes”. “Este tipo de generación es cara y no tendría sentido montar un sistema para una cantidad menor”, señaló el funcionario giojista.

Del Bono aseguró que en función de la condición de habitantes, “Jáchal, Caucete y Media Agua, en Sarmiento, dan con las condiciones para instalar la turbina”. Sin embargo, aclaró que en caso de conseguir el financiamiento, el lugar surgirá de un estudio entre técnicos de su área, el INTI, la Secretaría de Medio Ambiente y la EPSE, todos organismos que participan en el proyecto.

Si prospera, sería el tercer mecanismo distinto de generación de energía de la provincia. El más importante es el hidroeléctrico, con la centrales de los diques Los Caracoles, Ullum y Cuesta del Viento, que juntos tienen una potencia instalada de 177 megavatios. El otro, más reciente, es el fotovoltaico. La planta solar de Ullum genera 1,2 megavatios y la de Cañada Honda, 5 megavatios, con proyección a llegar a 20.