Eduardo Cabello está al frente de la delegación local de la Confederación General del Trabajo (CGT) desde diciembre de 2008 y ahora consiguió por quinta vez el respaldo para continuar en el mando de la central sindical hasta fin de año. En un plenario que tuvo lugar en la histórica sede de la avenida España logró que 36 sindicatos apoyaran su continuidad en el puesto, hasta que haya un nuevo llamado a elecciones. Todo dependerá de lo que ocurra a nivel nacional, donde hay negociaciones para unificar los tres sectores en los que ahora está dividido el movimiento obrero.
La CGT es un espacio clave de poder porque el que está sentado en el sillón de la conducción puede negociar con el Gobierno de turno desde condiciones de trabajo de los empleados, viviendas y hasta cargos. Y por eso siempre ha sido un lugar apetecido. Incluso ha sido un trampolín para la política, como en el caso de Cabello, quien logró conquistar una banca en la Cámara de Diputados de la provincia.
El referente de la UOCRA llegó por primera vez a la central obrera en diciembre del 2008, tras un acuerdo de los gremios más fuertes. Y tras un mandato de 4 años, en diciembre del 2012 le concedieron la primera prórroga, que se volvió a repetir en febrero de 2013. En esa oportunidad, el argumento fue que como se trataba de un año eleccionario, y por gestiones del Gobierno, que no quería un gremialismo dividido, se decidió dejar las cosas como estaban. Después vino el accidente en el helicóptero de José Luis Gioja, por entonces al frente del Ejecutivo provincial, y no se consideró oportuno un recambio. La última prórroga fue en diciembre de 2014, aunque tuvo algunas críticas por falta de “legitimidad”. Y ahora fue la quinta. Fue durante un plenario que tuvo lugar el viernes 18, con la presencia de 36 gremios que acompañaron en la decisión. Entre otros había representantes de FOECYT, Telefónicos, UOM, Estaciones de servicio, Rentas y horizontal, Fideeros, Bancarios, Gráficos, AMET, Prensa, UDA, Panaderos, Plásticos, Viales y Judiciales.
Los dirigentes presentes decidieron esperar los resultados de las negociaciones encaradas a nivel nacional, donde los jefes de las tres CGT, Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y Antonio Caló, buscan unificar sus mandatos en una sola conducción, que podría ser tripartita.

