Carlos Macchi deberá hacer un nuevo intento para que la Corte Suprema de Justicia revise la sentencia que lo destituyó de su cargo de juez. La Corte de Justicia local le rechazó el primer planteo dirigido a la máxima instancia nacional y ahora sólo le queda la opción de formular un recurso federal de queja, lo que le significará un desembolso de 15 mil pesos. El exmagistrado pretende que el tribunal que encabeza Ricardo Lorenzetti revoque el fallo que lo encontró responsable de cometer irregularidades en juicios millonarios de expropiaciones.

Macchi fue destituido en diciembre de 2013 por el Jurado de Enjuiciamiento, quien lo condenó en forma unánime por las causales de mala conducta y falta de cumplimiento de los deberes a su cargo. Le enrostraron haber cometido severas anomalías en 5 juicios de expropiaciones que le costaron millones de pesos al Estado y favorecer al abogado Santiago Graffigna, sindicado como el líder de una presunta asociación ilícita que se dedicaba a inflar ilegalmente el valor de los terrenos.

El fallo que lo destituyó es de carácter administrativo y el exjuez decidió dar pelea en la vía judicial. Primero apeló ante la Corte de Justicia de la provincia y como no tuvo suerte, presentó en noviembre último un recurso extraordinario dirigido al máximo tribunal del país.

Ese planteo se presenta sin costo alguno ante la Corte local, quien tiene que resolver si lo admite o no formalmente. Finalmente, a pocos días de terminar el año que se fue, el máximo tribunal provincial rechazó la presentación de Macchi por considerar que tiene errores en cuanto a la sentencia que ataca y que ‘no ha rebatido consideraciones básicas‘ del fallo que lo destituyó. ‘La impugnante no demuestra su eficacia y pertinencia para variar el resultado de la cuestión‘, sostienen en la resolución los cortistas Adolfo Caballero, Juan Carlos Caballero Vidal y Carlos Eduardo Balaguer.

Así las cosas, a Macchi le queda un solo camino: un recurso llamado ‘de queja‘, que no debe pasar ningún filtro aquí y que ingresa directamente a la Corte Suprema. Claro que, para eso, tendrá que enfrentar un costo de 15 mil pesos en concepto de sellado.

Es casi seguro que el exjuez tomará ese camino. Su abogado, Guillermo Toranzo, insiste en que el Jurado de Enjuiciamiento violó el derecho de defensa de su cliente y asegura que agotará todas las vías para revocar la sentencia destitutoria, incluso con recursos ante tribunales internacionales en caso de ser necesario.

Paralelamente, el exmagistrado ha buscado neutralizar con planteos de distintos tenor los efectos de su remoción. Pero, por el momento, tampoco ha tenido éxito (ver recuadro).

El otro frente de batalla que debe atender es la causa penal que se disparó por el mismo escándalo, el de las expropiaciones. Macchi fue denunciado por el fiscal de Estado, Guillermo De Sanctis, quien intenta demostrar que sus faltas fueron delito. El exjuez fue procesado por fraude contra el Estado y por ser partícipe de la supuesta red delictiva y apeló ante la Cámara Penal.