El juez de la Sala I de la Cámara Penal, Agustín Lanciani, presentó su renuncia para jubilarse con el 82 por ciento móvil. Hasta septiembre de 2011, Lanciani fue juez de primera instancia (entre sus casos más resonantes, investigó el crimen de María Rosa Pacheco) y luego ascendió a camarista.
