En el primer semestre del año que viene habrá un nuevo megajuicio por delitos de lesa humanidad cometidos en San Juan en los meses previos al golpe militar y tras la caída del régimen democrático. En el banquillo habrá 33 acusados de haber sometido a delitos de torturas, muerte y hasta la desaparición de más 100 víctimas, según informó el fiscal federal, Francisco Maldonado. El proceso será incluso mayor al que finalizó en julio de 2013, en el que hubo 7 condenados a penas 25 años de cárcel y de reclusión perpetua (ver aparte).
Hasta ahora ya fueron elevadas a juicio la llamada Compulsa Bustos y las causas Nívoli y Mazzitelli y están en etapa de instrucción el caso de los expolicías y el de Farías, un joven que fue secuestrado y luego asesinado por las fuerzas de seguridad.
Según dijo Maldonado, será una tarea ‘ardua‘, pero quieren tener todo listo para que el debate comience antes de mediados del año que viene, con intervención del Tribunal Oral Federal (TOF), para lo que habrá que constituir un nuevo jurado con la participación incluso de representantes de otras provincias, como ya sucedió con anterioridad.
Los acusados son Jorge Olivera, Gustavo Ramón De Marchi, Daniel Gómez, Francisco Del Torchio, Juan Carlos Mendez Casariego, Osvaldo Benito Martel, Eduardo Daniel Cardozo, Jorge Páez, Walter Mello y Elías Lucero Arancio. Los expolicías son son Miguel Ángel Mereles, Carlos Olha, José Escudero, Alejandro Pereyra, Pedro Luis García, Armando Steiner, Carlos Faustino Alvarez, Ramón Ignacio Montaña, José Claudio Guzmán, Enrique Graci Susini, José Hilarión Rodríguez, Darwin Vainor Mejías, Nicolás Damacio Manrique, César Raúl Oro, Alberto José Bazán, Carlos Saavedra, Pedro Raúl Aravena, Pedro Robledo, Federico Retamar, Juan Carlos Turón, Juan Carlos Torres, Juan Carlos Coronel y Rubén Arturo Ortega.
Las causas que serán analizadas en el proceso tienen que ver, en el caso de la Compulsa Bustos, con la continuidad de la llamada causa Bustos, en la que aparecen como víctimas, por ejemplo, el gobernador José Luis Gioja y el cortista José Soria Vega. La causa Nívoli está vinculada con detenciones a estudiantes, gremialistas y dirigentes políticos con anterioridad al golpe militar del ’76. La causa Mazzitelli tiene que ver con víctimas desaparecidas durante la última dictadura militar. En el caso de la llamada causa de los expolicías se trata de quienes fueron miembros del área de inteligencia de la Policía de San Juan, el llamado D-2. Según documentación encontrada, estos ex uniformados realizaron las tareas de inteligencia previa de quienes luego fueron detenidos, y en diversos casos participaron en los allanamientos, algunos de los cuales dieron resultado negativo porque algunos lograron huir. Con posterioridad, el despliegue del aparato de seguridad los detectó y permitió su secuestro y en muchos casos hasta su desaparición.
Hasta ahora la Justicia Federal no ha podido llevar adelante nuevos debates. La primera razón ha sido la dificultad para constituir un tribunal porque en la región se están llevando adelante varios juicios y los jueces se tienen que turnar para estar presentes en los procesos. Además, cuando las causas se elevan a juicio, vienen las apelaciones, lo que demora el trámite considerablemente.