A menos de una semana de la sanción de la ley del 82 por ciento móvil del salario mínimo para los jubilados y el posterior veto presidencial, el senador oficialista César Gioja presentó ayer un nuevo proyecto referido al tema. La iniciativa propone lo mismo que la que rechazó la Casa Rosada, pero amplía a 3 años los plazos para cumplir con los incrementos de "manera que se pueda hacer sin comprometer las cuentas del Estado". El sanjuanino había dicho que iba a invitar a Roberto Basualdo a que lo acompañara, pero hablaron del tema y finalmente lo presentó sin la adhesión del opositor.
El proyecto, que no pasó por la Casa Rosada, ingresó a la Cámara de Senadores pasadas las 14, apenas cinco días después del enérgico veto de Cristina a la ley que promovió la oposición en el mismo sentido. La senadora sanjuanina Marina Riofrío, compañera de bloque de César, dudó en apoyarlo y lo condicionó a que haya sido consensuado con el Ejecutivo y el jefe de la bancada kirchnerista.
Según Gioja, "lo he presentado porque estoy convencido que hay que mejorar el sistema previsional, pero hacerlo de manera ordenada y responsable para no poner en jaque las cuentas del Estado". Y dijo que en los próximos días lo charlará con sus compañeros de bloque y con las autoridades de la Anses, el organismo que administra los recursos previsionales.
El planteo de fondo es igual al de la ley que vetó Cristina. Es decir, que las jubilaciones mínimas pasen a ser equivalentes al 82 por ciento del salario mínimo, vital y móvil -de 1.046 pesos se irían a algo más de 1.500- y que el resto de los haberes de los pasivos se actualicen de acuerdo a la movilidad que dispone la jurisprudencia de la Corte Suprema. Pero incluye un cambio sustancial en los plazos: la ley vetada disponía "30 días para hacer frente a 9 mil millones y 120 días para pagar 40 mil millones"; mientras que la propuesta de Gioja es que los incrementos "se hagan de manera gradual" en un plazo no mayor a 3 años y que sea "en función de la disponibilidad financiera" de las arcas públicas.
Gioja, después de decir públicamente que la iba a aprobar, el jueves pasado se terminó alineando con la voluntad del gobierno nacional y votó en contra de la ley opositora. Al otro día explicó que cambió su voto porque la oposición no accedió a hacer algunos cambios que él pedía y a que los antikirchneristas "buscaban el veto y yo no me iba a prestar a ese juego".
El mayor de los Gioja había anunciado su nuevo proyecto el sábado, en Radio Colón, y dijo que iba a invitar a Basualdo a que adhiriera. César se limitó ayer a decir que lo presentó solo. Pero fuentes calificadas aseguraron que hablaron del tema y que quedaron en no mezclar las cosas, por lo que el peronista disidente decidió no firmar la iniciativa. Este diario se intentó comunicar telefónicamente con el líder de Producción y Trabajo, pero no fue posible.
Mientras tanto, Riofrío se mostró muy cauta: "no puedo opinar, porque no conozco el proyecto".
Según la senadora, "quiero ver primero si lo consultó con las áreas que corresponden del Ejecutivo y con el jefe de bloque" -por Miguel Angel Pichetto, con quien Gioja tuvo roces por la ley de glaciares-.
Sobre si César le pidió que lo apoyara, la sanjuanina dijo que "no" y en tono irónico recordó que "lo hizo con Basualdo". Finalmente insistió que antes de decidirse, "veré si lo consultó".

