Tranquilo. Roberto Mario León (derecha) se presentó al juzgado de Leopoldo Rago Gallo acompañado de su abogado, Carlos Daniel Rivadeo (izquierda).

Era el jefe que tenía a cargo la delicada y sensible investigación por la desaparición de Raúl Tellechea, pero ante la Justicia Federal dijo no tener todos los detalles de la causa. Por ejemplo, en declaraciones realizadas en sede policial por tres sospechosos que hoy están procesados, el excomisario Mario León manifestó que él no las tomó. A la querella ese punto no le cierra, dado que asegura que las mismas fueron armadas por el ex jefe policial. Por otro lado, declaró que tampoco tomó contacto con el resultado de pericias que llevó adelante Criminalística, en el que faltaron fotos y datos clave. Además, indicó que al ser el responsable de un área que investigaba múltiples y variados casos, no podía tener conocimiento de qué pasada en cada expediente. Esas fueron algunas definiciones de León, quien también está en la mira por la desaparición forzada de Tellechea, al igual que el exjefe de Policía Miguel González (ver recuadro) y Aurora Isabel Ahumada, empleada de la Mutual de la UNSJ, donde trabajaba el ingeniero.

La causa tuvo un giro de 180 grados a partir de 2011, cuando pasó a la órbita Federal. Tras analizar las actuaciones, el juez Leopoldo Rago Gallo entendió que hubo un grupo de personas que "deliberadamente orquestaron un plan para secuestrar a Tellechea, a fin de ocultar el irregular manejo de los fondos de la mutual". En ese marco hay seis procesados: Miguel Del Castillo, Luis Alonso, Rubén Eduardo Oro y Luis Moyano, quienes pertenecían a la Mutual de la UNSJ. Los dos últimos además fueron funcionarios del Ejecutivo en la pasada gestión. También están procesados el expolicía Alberto Flores y Sebastián Cortéz Páez.

La declaración de León en la Justicia fue extensa: comenzó y se extendió durante el martes y continuó el jueves por más de seis horas.

El abogado querellante, Conrado Suárez, que representa a la familia Tellechea, al igual que el fiscal Francisco Maldonado, le marcan a León una participación clave, ya que señala que desvió la investigación, adulteró documentos como declaraciones, demoró los pedidos hechos por el juez correccional provincial que por entonces instruía la causa y ocultó información para, de esa manera, favorecer a los verdaderos implicados. El excomisario encabezaba la comisión policial que debía reunir las pruebas, analizarlas y elevárselas al juez para dar con el paradero del ingeniero. Sobre las imputaciones, León negó todo e indicó que no confeccionó las testimoniales de Del Castillo, Oro y Alonso, que llamativamente resultaron ser prácticamente idénticas, de acuerdo al expediente. El excomisario dijo que esas declaraciones fueron tomadas por un funcionario policial de menor rango, como sucede en procedimientos similares. La imputación indica que el ex jefe policial mantuvo un encuentro con los tres implicados horas antes de que estos dieran esas declaraciones, cosa que León negó al indicar inclusive que no los conoce.

Otro de los puntos cuestionados son los resultados de las pericias del rastrillaje hecho por Criminalística en el dique de Ullum, información que no fue enviada en tiempo y forma como lo requirió el juez. Según el abogado, Carlos Rivadeo, León dijo que esa documentación no pasó por sus manos, ya que esa área "envió el resultado al juzgado directamente". Además, el profesional destacó que el excomisario se desligó de las responsabilidades de su cargo, al manifestar que "algunas declaraciones fueron tomadas en sede judicial", por lo que tampoco tenía conocimiento de ellas. Por otro lado, expresó que su defendido recibía órdenes del juez, quien sí conocía todas las actuaciones.

En la mira y el delito

Aurora Isabel Ahumada

La mujer es empleada de la Mutual de la UNSJ, lugar donde trabajaba Raúl Tellechea. Su indagatoria será la próxima semana, en día a confirmar. Según la querella, Ahumada aportó una pista falsa, con lo que ayudó a desviar la investigación.

Delito

Tanto González como León y Ahumada están imputados como presuntos partícipes del delito de desaparición forzada de persona, el cual tiene una pena de 10 a 25 años de prisión. Los tres gozan del beneficio de la excarcelación.

González se desligó


A fines de septiembre, el exjefe de Policía de la gestión giojista, Miguel González, fue indagado en el Juzgado Federal por su presunta participación en la desaparición de Tellechea. La imputación apunta a su responsabilidad por haber sido la máxima autoridad de la fuerza. Tras la declaración, su abogado, Rolando Lozano, manifestó que González no estaba al tanto de la investigación y cargó las tintas contra Mario León, el responsable de Seguridad Personal y luego de la comisión especial que se creó para averiguar el paradero de Tellechea. El defensor había explicado que el exjefe de la Policía declaró que "no fue el instructor sumariante y sólo se informaba por lo que le comunicaban sus subalternos". Y que las actuaciones que le había requerido el juez, las remitió cuando se terminaron y que no hubo demoras en su envío.