El presunto autor de las amenazas a la presidenta Cristina Fernández el 11 de diciembre pasado, a través de interferencias al helicóptero gubernamental en las que se escucharon mensajes como "maten a la yegua", fue detenido por la Policía Federal en su casa de la localidad bonaerense de Monte Grande y se negó ayer a declarar ante la Justicia. Se trata de un radioaficionado de 60 años a quien se les secuestraron equipos electrónicos, antenas portátiles, direccionales y fijas; computadoras, teléfonos y armas, informaron fuentes judiciales.
El acusado quedó detenido en la Alcaldía del Palacio de Tribunales y hoy será trasladado nuevamente al juzgado de Lijo para realizar una pericia de voz y determinar si fue él quien realizó las amenazas.
El hombre quedó acusado de los delitos de interrupción de comunicaciones al helicóptero presidencial, tenencia de armas y tenencia de armas de guerra. Los dos últimos cargos se sumaron tras el allanamiento realizado el martes por Dirección de Seguridad Interior de la Policía Federal.
La defensora oficial Silvia Otero Rella pidió su excarcelación, que será resuelta hoy por el juez Lijo, previo dictamen que debe dar el fiscal de la causa, Eduardo Taiano.
El acusado se presentó ante el juez como técnico en computación y también sería técnico mecánico en aviación civil, según información que posee el juzgado, aunque por el momento se descartaron vínculos con alguna fuerza de seguridad.
Los voceros explicaron que Lijo ordenó pericias sobre los teléfonos y las computadoras secuestradas "para determinar si detrás de las interferencias hay otras personas".
Las fuentes agregaron que el detenido había sido intimado por la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) a cesar sus actividades como radioaficionado, ya que previo al hecho con el helicóptero presidencial, el 11 de diciembre cuando Cristina se trasladaba a Olivos, habría realizado otras interferencias.