BUENOS AIRES, oct 29 (DyN) – Una multitud acompañó hoy el cortejo fúnebre que trasladó a Néstor Kirchner hasta el Aeroparque Jorge Newbery, desde donde fue llevado a Río Gallegos, su ciudad natal.
La caravana partió de la Casa de Gobierno a paso de hombre, después de que la Banda de Música de Granaderos despidiese al ex mandatario con la Marcha de San Lorenzo, mientras una guardia de honor lo despedía con sables en alto como parte del saludo protocolar.
Miles de personas aguardaron el paso del cortejo que fue saludado con aplausos, cánticos, muestras de simpatía, banderas argentinas y partidarias, bajo una lluvia que por momentos fue intensa.
La marcha de automóviles fue encabezada por el vehículo que transportaba el cuerpo del ex presidente, al que acompañaron otros que trasladaban a la presidenta Cristina Fernández, sus familiares directos y funcionarios.
El cortejo salió a las 13.17 de la Casa Rosada en marcha lenta, recorrió las avenidas Leandro N. Alem, Córdoba, Libertador y calle Salguero, donde su paso fue celebrado con signos de afecto.
El traslado del cuerpo del ex primer mandatario fue custodiado en todo su trayecto por un fuerte operativo de cuerpos de seguridad, que debieron abrir paso ante la multitud que buscaba acercarse al féretro. Con el fondo de una Buenos Aires gris, el pueblo se agolpó en las veredas con paraguas para observar el paso de los autos, saludar al cortejo con cantos de simpatía, arrojar papelitos y esforzarse por tocar el rodado que lleva el féretro a la aeroestación porteña.
Coreando el nombre del ex presidente, acompañado de ‘Kirchner no se va‘ y ‘Fuerza, Cristina‘, muchos de los movilizados por la despedida del ex jefe de Estado arrojaron flores al vehículo, cuyo techo quedó cubierto.
El fervor manifestado durante las horas que duró el velatorio en la Galería de los Patriotas Latinoamericanos de la Casa Rosada, continuó en las calles porteñas para brindar el último adiós al líder político, muerto el miércoles de un paro cardiorrespiratorio.
Tras un recorrido que demandó más de una hora por las arterias que comunican el centro con aeroparque, mientras continuaba una intensa lluvia, la presidenta Cristina Fernández y sus familiares subieron al mismo avión que trasladaba los restos del ex mandatario con destino final a la capital de Santa Cruz.