Apenas se supo de la liquidación del Hospital Español, Sergio Uñac llamó al ministro de Salud y le pidió que analizara con su equipo si es viable que la provincia se haga cargo de ese nosocomio y si sirve para cumplir una de las metas que se impuso para su gestión: hacer un moderno centro público de pediatría. De ese estudio no surgió ningún obstáculo legal o técnico, la intención está y ahora sólo resta que el gobernador decida si avanza. Lo que más interesa es que el histórico sanatorio privado cuenta con infraestructura y espacio para ser convertido en un gran hospital de niños, además de no prescindir de la cantidad de camas que ofrece. El liquidador escucha ofertas: su desafío es evitar el desguace, que alguien se haga cargo de los 38 millones que adeuda la institución y preservar los puestos de trabajo, condiciones que la administración uñaquista estaría dispuesta a asumir.
El Español es uno de los sanatorios privados más antiguos de San Juan y su crítica situación se terminó de confirmar la semana pasada (Ver recuadro). La Inspección de Persona Jurídica publicó en el Boletín Oficial el edicto de disolución y liquidación de la entidad que pertenece a una sociedad de beneficencia. Los motivos: la imposibilidad de hacer frente a las millonarias acreencias que ha acumulado y la falta de socios activos (a la última asamblea no fue ninguno).
Persona Jurídica designó como liquidador al contador Osvaldo Rebollo, quien ahora deberá analizar las propuestas que puedan presentarse para sanear la institución o rematarla y pagar las deudas. El objetivo de máxima es escaparle a la segunda opción y la aparición del Estado podría ser un camino.
Fuentes calificadas aseguraron que Uñac está estudiando formular en los próximos días una propuesta para que la provincia se quede con el Español, por entender que encaja justo con el objetivo que tiene en mente de hacer un hospital de niños. Y, según dijeron, aparte de mantenerlo en funcionamiento y hacerse cargo de los millonarios pasivos, la oferta incluiría la absorción de los cerca de 100 empleados estables que trabajan en el lugar.
Si el plan se concreta, será inédito. San Juan dispone solamente de un servicio de pediatría en el sector público (en el Rawson) y algunas clínicas infantiles en la parte privada y por primera vez, pasaría a tener un amplio centro estatal de salud que sea exclusivo para niños y adolescentes y que abarque todas las especialidades médicas.
Además de las ventajas edilicias que da el Español para ampliar y mejorar la atención de los niños, las fuentes contaron que en el análisis de Uñac hay factores extra que lo empujan a dar el paso. Por razones presupuestarias no está en su esquema de gestión el salvataje de entidades privadas a punto de caer, pero el sanatorio estuvo intervenido por el Estado en los últimos 5 años tras conducciones deficitarias y en su estatuto dice que los remanentes de activos deben quedar para Salud Pública.
Otro tema que pesa es que, sea privado o estatal, el cierre de un centro de salud de ese tamaño implicaría que San Juan pierda una porción muy importante de su capacidad de respuesta a las personas enfermas. El servicio de internación del Español tiene 40 camas comunes y 8 de Terapia Intensiva y un proceso de desguace derivaría en que desaparezcan.

